Los campaneros de la torre del Miguelete de la Catedral de Valencia realizan cada 10 de agosto el tradicional “repret de les campanes” o apretado de los tornillos de los yugos de madera de las campanas para fijarlas más. Las altas temperaturas de esta jornada hacen que los hierros que fijan las campanas a sus “truges”, o yugos de madera, estén dilatados al máximo, “y por tanto se pueden apretar un poco más, fijando mejor la pieza”, según ha indicado Francesc Llop, presidente de la asociación “Campaners de la Catedral de València”.
Se trata de una tradición con origen en la Edad Media que llevaban a cabo los campaneros en el que era considerado tradicionalmente como el día más caluroso del año, el 10 de agosto, festividad litúrgica de San Lorenzo, martirizado al ser quemado en una parrilla.
Las campanas son levantadas de menor a mayor por los campaneros, que aprietan los hierros que fijan las piezas a los yugos de madera. Una vez finalice “el repret de les campanes”, la campana mayor de la torre del Miguelete, conocida como “La María”, es volteada a mano para anunciar que todo ha salido bien. El próximo 15 de agosto, las campanas de la Catedral de Valencia serán volteadas a mano con motivo de la fiesta de la Asunción de la Virgen.