La Torre ha vivido esta mañana un intenso simulacro de inundación organizado por el Ayuntamiento de València con el objetivo de poner a prueba los protocolos de actuación ante una hipotética rotura de la mota del río Turia. Desde primera hora, la pedanía se ha convertido en un escenario de despliegue coordinado en el que han participado los Servicios de Emergencias Municipales, la Alcaldía Pedánea y diferentes centros educativos y sociales del barrio.
La jornada ha comenzado a las 11:00 horas con la constitución del CECOPAL en la Sala CISE, desde donde se han ido emitiendo instrucciones al Puesto de Mando Avanzado (PMA), situado en el puente de acceso a La Torre.
En primer lugar, a partir de las 12:00 horas, los cuerpos de emergencia han recibido la llamada del 112 por la supuesta fuga de agua en el Río Turia. Tras ello se ha procedido a la activación de la sirena de aviso, tres minutos de sonido discontinuo desde la azotea de la alcaldía, que ha marcado el inicio del supuesto escenario de emergencia, al que han reaccionado tanto los equipos participantes como la ciudadanía.
Traslado de Centros Educativos y de Mayores a zonas altas
Durante el simulacro, las calles de La Torre se han llenado de movimiento. Vehículos de Bomberos y Guardia Civil, así como Policía Local de València y de municipios próximos como Catarroja o Paiporta, han recorrido la zona, acompañados de patrullas que han emitido mensajes de megafonía para informar a los vecinos.
Desde todos los espacios implicados como el Centro de Mayores, la Universidad Popular, el Consultorio Médico, el Centro Ocupacional, la Biblioteca y el CEIP Padre Manjón; se han llevado a cabo ejercicios de evacuación y confinamiento siguiendo las directrices establecidas.
En el centro educativo han enviado al alumnado a las zonas altas, mientras que en la residencia de la tercera edad, han estado practicando el traslado de los usuarios a espacios fuera de peligro.
Un simulacro, sin peligro para la ciudadanía
La ciudadanía, previamente informada, ha sido llamada a mantener la calma, seguir las indicaciones oficiales y evitar interferir en la circulación de los vehículos de emergencia. La organización ha recordado durante toda la mañana por megafonía que se trataba de un simulacro y ha insistido en la importancia de no generar alarmas innecesarias.
El operativo también ha incluido cortes temporales de acceso al núcleo urbano, especialmente en la entrada desde la V-30 (salida 4), así como en varias calles principales como J. Soto Micó, Carretera d’Alba y Avenida Europa a la altura de Molí de la Pala. Asimismo, el conocido puente peatonal de La Solidaritat ha permanecido cerrado mientras duraban las actuaciones.
La sirena de fin de emergencia se ha escuchado a las 12:30, dando por concluida la operación. Con este ejercicio, el Ayuntamiento de València pretende reforzar la preparación tanto de los equipos de emergencia como de la población ante posibles episodios de inundación, un riesgo real en períodos de lluvias intensas. Según los organizadores, el balance es positivo y la coordinación entre organismos y vecinos ha sido “fundamental para garantizar la seguridad en situaciones críticas”.
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