La presión vecinal consigue una desocupación en tiempo récord en San Antonio de Benagéber. El inmueble vacío es propiedad de la Sareb y estaba generando problemas de convivencia en la Urbanización de San Vicente.

El incidente, que tuvo lugar el pasado 15 de agosto, había provocado que los residentes de este municipio hubieran liderado diferentes protestas ante los conflictos que estaban surgiendo en esta urbanización, que dispone de diferentes zonas comunes. Unas manifestaciones en las que han estado acompañados por diferentes miembros del equipo de gobierno que se quisieron solidarizar con la comunidad de vecinos desde el primer momento, al tiempo que ofrecieron diferentes alternativas de techo a los usurpantes.

La ocupación finalizó ayer, 19 de agosto, después de que el grupo abandonara de manera pacífica el inmueble. Durante este tiempo, el Ejecutivo ha trabajado junto a las fuerzas de seguridad y el banco propietario en los mecanismos existentes para permitir acelerar el poner solución a esta situación. Estas gestiones han finalizado en un acuerdo judicial exprés llevado a cabo en la mañana de este 20 de agosto, donde el banco ha pactado con los ocupas la entrega voluntaria del inmueble. No obstante, el adosado ha sido intervenido en las últimas horas para imposibilitar que se repitan incidentes de este tipo en el futuro.

La primera edil, Eva María Tejedor Marí, ha querido agradecer toda la colaboración de los vecinos del municipio que se han volcado a la causa estos días, ante la imposibilidad legal que impedía al Ayuntamiento una intervención directa sobre los ocupantes del inmueble, y que han permitido «solucionar el problema con una gran celeridad».