Primero, como doble álbum de vinilo. Luego, como película. Jesucristo Superstar pasó a la historia de la música y el cine por ser una relectura escandalosa del Evangelio. Cuando Tim Rice y Andrew Lloyd Webber la compusieron, sabían que sólo con la música lograrían expresar aquello que la palabra no se atreve.
Porque sí, puede que el Nuevo Testamento sea intocable. Entonces admitamos sin discusión que Judas fuese un traidor. Que María Magdalena nunca miró con deseo al Mesías. O que Pilatos, aparte de mojarse las manos, nunca tuvo ningún sentido del ritmo. Pero todos ellos, cuestionando las Sagradas Escrituras, enamoraron a la cámara. Mientras un coro espléndido cantaba: “Jesucristo, Jesucristo, ¿quién eres tú? ¿Qué has sacrificado?”.
María Magdalena (Yvonne Elliman) despeja cualquier duda: “He’s a man, he’s just a man” (“Es un hombre, sólo un hombre”). “Y he conocido muchos”, añade. Efectivamente, aunque brille como una súper estrella, la figura de Cristo resulta la encarnación más terrenal.
La obsesión de Tim Rice era narrar que, como Judas, todos acabaríamos entregando a ese amigo lunático que afirma ser la encarnación de Dios y se sitúa por encima de cualquier autoridad. Ignorantes como él de que ello pudiera suponer su pena de muerte.
En términos coreográficos y musicales, queda también clara la mayor importancia del actor Carl Anderson. En la piel de Judas canta y se mueve con más gracia que Ted Neeley encarnando a Cristo. Plagada de anacronismos, de vestuario hippie, drogas, metralletas, tanques o aviones, la versión cinematográfica sigue impactando. Por poner solo un ejemplo, logró que Israel pasara de ser el marco original de esta historia inmortal a una localización accesible, contemporánea y, por eso mismo, sorprendente.
Jesucristo Superstar: Noche de Rock y Cine «Prohibido» en Rambleta
Este Jueves Santo, Rambleta te invita a revivir Jesucristo Superstar de una forma totalmente innovadora. A las 20:30h, el Telón Bizarro vuelve a abrir sus puertas. En esta ocasión, con la proyección de la mítica película de 1973. Pero la noche no termina con los créditos.
La velada arrancará incluso antes de que se apaguen las luces. Y continuará cuando finalice la película. Las «incomodadoras» guiarán a los espectadores hacia una experiencia que trasciende la pantalla. Además, Vedra Ponte y sus discípulos (Rocky Horror Band) deleitarán al público con canciones de la banda sonora en castellano. Todo ello, de la espléndida versión de Camilo Sesto.
Cine, Música en Directo y Cena «Divina» en Rambleta
Para enriquecer aún más la experiencia, contaremos con el crítico de cine Daniel Gascó. Él compartirá anécdotas curiosas sobre la película. Además, ha preparado la proyección de una joya: The heart of the World (2000) del cineasta canadiense Guy Maddin. Esta se proyectará justo antes del film principal.
En las sesiones de Telón Bizarro, ¡puedes traer tu propia cena al teatro! Una oportunidad perfecta para disfrutar de esta propuesta cultural de una manera relajada y original. No te pierdas esta noche que combina rock, cine y una visión provocadora de un clásico. Las entradas ya están disponibles.
