El Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana (COIICV) ha celebrado una sesión para consensuar las demandas más relevantes ante el proceso de consulta previa sobre la nueva ley de industria, puesta en marcha por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
El COIICV demanda como aspecto prioritario dentro del apartado de política y promoción industrial la necesidad de simplificación y agilidad máxima en los trámites burocráticos para la puesta en marcha de industrias, con el objetivo de no entorpecer su crecación y sí potenciarla. Pide criterios ágiles y sencillos para poner industrias a funcionar en un máximo de un mes.
Igualmente plantea una mayor dotación de suelo industrial con infraestructuras cohesionadas y óptimas para que operen las industrias. Rapidez de actuación administrativa, que el silencio administrativo sea interpretado como un “sí”, nunca como un “no”. Y una mayor fiscalidad y protección arancelaria para la industria nacional.
Esta sesión, que fue introducida por la decana del COIICV, Nieves Romero y contó con un nutrido grupo de representantes del COIICV de diferentes ámbitos industriales, ha tenido el objetivo de recabar la opinión de las personas y organizaciones más representativas afectadas por la futura norma. Esta nueva Ley de Industria es un compromiso de España dentro del Comportamiento 12 del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia, identificada como hito 176, en el que se recoge su entrada en vigor para el 4º trimestre de 2023.
Vertebración de otro tipo de palancas
En el plano de la reindustrialización, el COIICV demanda la búsqueda de oportunidades reales y la movilización y estandarización de zonas industriales basadas en el desarrollo de Clústers, según el análisis por áreas. Y por tanto, la importancia de las infraestructuras y la conectividad para unir y que unas zonas no pierdan competitividad respecto a otras. En este sentido argumentan que más que reindustrializar es necesario vertebrar otro tipo de palancas y mirar desde otra perspectiva, que es la del alto valor añadido y la innovación para aportar el valor del dato.
En cuanto a otro de los aspectos referidos en el texto, la neutralidad climática y economía circular, abogan por que esta nueva Ley contemple la profesionalización de la gestión de residuos, y pese a que sí hay que tender hacia el uso del hidrógeno verde, hasta el momento en el que esté más avanzado y sea más rentable, todavía es necesaria la facilidad para el uso de la energía nuclear. Además de la prohibición del impuesto al sol. En definitiva, solicita un cambio de normativa y adecuación al actual momento.
En referencia la transformación digital, desde el COIICV piden que el ámbito digital en esta ley se realice por expertos, sea simple, por supuesto digital, y esté basado en modelos que funcionan, modelo israelí en robótica y americano para la Inteligencia Artificial, adapatados a la idiosincrasia nacional. Y que contemple sistemas europeos, o como mínimo nacional, para armonizarlos y que haya una buena conexión.
Seguridad industrial 4.0
Desde el colectivo de industriales consideran prioritario además que en cuanto a seguridad y calidad industrial, la ley tiene que poner el foco en esta cuestión. También ha de hacer hincapié en la importancia de la declaración responsable en materia industrial. Igualmente, en la utilización de la transformación digital para que se agilicen estos procesos y no sea necesaria la presencia de personas con el fin de que no existan puntos ciegos para la sinisetralidad, aplicar el concepto de seguridad industrial 4.0.
También en materia de gobernanza, para que la Ley de Industria refuerce la coordinación para la aplicación y desarrollo de las directivas sobre Mercado Único Europeo en España, desde el COIICV piden que ésta no se haga más compleja y se legisle nuevamente a nivel nacional cuando ya está redactada a nivel europeo. Por tanto, sencillez máxima.
Durante su intervención en la sesión, la decana del COIICV, Nieves Romero subrayó como esta ley de industria “debe dar respuesta en clave nacional a la nueva estrategia industrial europea, recoger las recomendaciones del Consejo y contemplar las necesidades del sector industrial de España, establecer el marco adecuado para estimular la competitividad de la industria con la modernización del tejido productivo, reforzar su capacidad de generar empleo de calidad, fomentar su eficiencia energética, impulsar su capacidad de innovación y apostar por la transición hacia una economía circular”.