Agentes de la Policía Nacional han detenido en Algemesí (València) a un hombre de 31 años por estafa. El individuo robó 85.550 euros a su abuela, una mujer de avanzada edad.
La víctima relató que, meses atrás, acudió a una sucursal bancaria de Algemesí en compañía de su nieto. Allí firmó varios documentos sin ser consciente de su contenido, debido a su edad y problemas neurocognitivos. Asimismo, facilitó a su nieto las claves de su cuenta bancaria.
El nieto aprovechó esta situación para realizar extracciones de dinero y transferencias bancarias que sumaron un total de 85.550 euros. La estafa salió a la luz cuando la mujer volvió a la sucursal y comprobó que en su cuenta solo quedaban 47 euros, cantidad insuficiente para cubrir sus necesidades básicas.

Tras la correspondiente investigación, los agentes detuvieron al nieto, quien confesó haber utilizado el dinero para participar en apuestas y juegos de azar. El detenido ha sido puesto a disposición judicial.
DE LA ESTAFA A FAMILIARES AL «HIJO EN APUROS»
La detención del nieto por vaciar la cuenta bancaria de su abuela no es un caso aislado. En paralelo, la Policía Nacional ha arrestado a 32 personas implicadas en una trama de estafas por el método del «hijo en apuros», con el que llegaron a defraudar más de 320.000 euros a víctimas de todo el territorio nacional.

La investigación, iniciada en octubre del año pasado por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia, ha permitido esclarecer 63 denuncias. Además, se han conseguido bloquear transferencias por valor de 10.760 euros, que han sido devueltas a sus legítimos propietarios.

Entre los detenidos, cuatro actuaban como captadores de “mulas”, personas a quienes ofrecían una compensación económica a cambio de recibir en sus cuentas el dinero estafado. Estas “mulas” eran utilizadas para dificultar el rastreo del dinero y entorpecer la labor policial.
La Policía Nacional recuerda que colaborar con este tipo de redes puede conllevar responsabilidades penales, incluso aunque el implicado no participe directamente en la estafa. Tanto en el caso del nieto que vació la cuenta de su abuela como en esta red organizada, los estafadores se aprovecharon de vínculos de confianza y de la buena fe de las víctimas.












