Sanitarios proponen que la maniobra de Heimlich sea asignatura obligatoria en los colegios y para los profesionales de la hostelería. El atragantamiento es la tercera causa de muerte no natural en España. Cada años son muchas las personas que pierden la vida después de un atragantamiento.
Esta muertes podrían evitarse si supiéramos cómo actuar en estos casos. Son habituales los malos ratos por un trozo de comida que entorpece nuestras vías respiratorias. Los sanitarios recomiendan toser fuertemente. Si esto no funciona es porque tenemos una obstrucción completa, en ese momento hay que realizar la maniobra de Heimlich.
Simplemente tenemos que ponernos detrás de la persona, agarrarla con las manos por la parte del estómago y tirar sin hacer daño hacia atrás. Conviene actuar rápido ya que en solo dos minutos se entraría en parada cardiorrespiratoria. El 90% de los atragantamientos se resuelven gracias a ella.
Ante una persona que está sufriendo un atragantamiento, el primer paso es comprobar que la vía aérea no está obstruida completamente. Si es capaz de toser, es que puede respirar parcialmente, por lo que le debemos de animar a seguir tosiendo, sin golpearle. Inmediatamente, hay que llamar al 112 para explicar lo que ocurre.