Aldaia es el cuarto municipio afectado con 11.000 vehículos, 4.000 inmuebles, 1.000 comercios y 200 industrias, según datos del consorcio

La localidad valenciana de Aldaia sigue intentando recuperarse tras el devastador temporal del pasado 29 de octubre, que se saldó con seis víctimas mortales en el municipio. El alcalde Guillermo Luján ha visitado esta semana Ágora de 7Televalencia y ha expresado su frustración por la falta de una respuesta rápida y eficaz ante una situación que, según él, fue mucho peor de lo esperado. «Nadie nos avisó de que no era una DANA, era un tsunami«, declaró, subrayando que las medidas de prevención adoptadas resultaron insuficientes para el nivel de la catástrofe.

Un municipio golpeado por la tragedia

Aldaia ha sido uno de los municipios más afectados por el temporal, con más de 17.000 expedientes de daños registrados. «La afectación es global«, explicó el alcalde, detallando que 11.000 vehículos y 4.000 inmuebles han sufrido daños graves. Además, muchas familias siguen sin poder regresar a sus hogares, y numerosos comercios continúan cerrados, lo que genera una crisis económica local preocupante.

Uno de los principales problemas que enfrentan los vecinos es la falta de agilidad en la llegada de indemnizaciones y ayudas por parte del consorcio de seguros. «Las ayudas están llegando, pero no a la velocidad que se necesita», lamentó Luján. En este sentido, instó a las administraciones a acelerar los pagos para permitir que los afectados puedan reconstruir sus vidas lo antes posible.

Un fallo en la alerta que costó vidas

El alcalde insistió en que la tragedia podría haberse mitigado con una mejor gestión de la información. «Nosotros preparábamos al municipio para una DANA, porque eso era lo que nos indicaban. No nos dijeron que era un tsunami», reiteró. Según Luján, la clave para evitar futuras pérdidas humanas es mejorar los sistemas de alerta y actuación.

Como ejemplo de buena práctica, destacó que en la segunda DANA, ocurrida el 13 de noviembre, sí se envió una alerta a la población instándola a subir a los pisos altos para evitar ser arrastrados por el agua. «Ese mensaje tenía que haber llegado el 29 de octubre, pero nunca llegó«, criticó.

La necesidad de infraestructuras de prevención

Luján también se refirió a la importancia de realizar inversiones en infraestructuras que reduzcan el impacto de futuras catástrofes naturales. En particular, mencionó el necesario desvío del Barranco de la Saleta, una obra pendiente desde hace 40 años. «No podemos evitar que llueva, pero sí podemos evitar que la lluvia cause estragos en la vida de las personas«, afirmó.

VÍDEOS | Caos por el temporal: calles inundadas y carreteras anegadas
Dos coches semisumergidos en un paso inundado en Aldaia en una imagen de archivo de 2023. / KAI FORSTERLING (EFE)

En este sentido, hizo un llamamiento a todas las administraciones, sin distinción de colores políticos, para que se comprometan a ejecutar estas obras cuanto antes. «No se trata de partidos, se trata de gestión«, insistió.

Frustración y reconstrucción tras la DANA

El sentimiento de frustración en Aldaia es generalizado. No solo por las vidas perdidas, sino también por el lento proceso de reconstrucción. «La gente está desesperada«, afirmó el alcalde, quien ha estado en contacto directo con los vecinos desde el primer día de la tragedia.

Uno de los puntos de mayor tensión ha sido la situación de los ascensores y garajes anegados, que han dejado atrapados en sus viviendas a personas mayores y con movilidad reducida. «Hay gente que lleva más de tres meses sin poder bajar a la calle«, denunció.

Pese a las dificultades, Luján afirmó que el pueblo de Aldaia está demostrando una gran capacidad de resistencia y solidaridad. «Vamos a salir adelante, pero necesitamos apoyo real y efectivo«, concluyó.

Mientras tanto, el municipio sigue esperando que las lecciones aprendidas tras esta tragedia se traduzcan en acciones concretas para evitar que una situación similar vuelva a repetirse.