Los números cuadran y el Ayuntamiento de València podría volver a tener un gobierno de izquierdas cuatro años más con un simple apretón de manos de Joan Ribó y Sandra Gómez. Los 10 concejales de Compromís y los 7 del PSPV-PSOE suman los 17 escaños de la mayoría absoluta en el consistorio. Sin embargo, y a pesar de estar claro el objetivo de formar un nuevo gobierno progresista, la cuerda se tensa con el reparto de las concejalías.
La segunda edición del Govern de la Nau se quedaría sin uno de sus actores de cara a estas negociaciones, al quedar Unides Podem sin representación municipal. Los encuentros para avanzar en el nuevo gobierno podrían empezar esta misma semana. Éste, al menos, es el deseo expresado por la socialista Sandra Gómez. Y áreas conflictivas en la anterior legislatura como la de Cultura Festiva y Mobilidad Sostenible podrían estar en el centro de las conversaciones, así como Vivienda, de la que hasta ahora estaba al cargo la candidata de Unides Podem, María Oliver.
El alcalde electo de València, Joan Ribó, aseguró tras la noche electoral que en la formación de gobierno de coalición con el PSPV «todo está por discutir» y que el puzzle «no está ni montado» aunque ha dicho que «ha de ser diferente». Gómez, por su parte, ha pedido serenidad y ha garantizado que tanto la negociación como el gobierno tendrán un liderazgo compartido.
Las urnas le dieron la fuerza a Compromís, la fuerza más votada en la ciudad y 10 concejales –uno más que en 2015-. El PSPV es ahora la tercera fuerza de la ciudad con 7 ediles, dos más que en los anteriores comicios. Por ello, Gómez reivindica de cara al nuevo pacto que el crecimiento del PSPV-PSOE ha permitido mantener el Govern de la Nau.
La socialista también ha avanzado que la prioridad es determinar los retos de la ciudad antes que el reparto de concejalías; mientras que Ribó ha propuesto áreas gerenciales «más articuladas» para trabajar de forma más rápida y eficaz que en los últimos cuatro años. Dos planteamientos que tendrán que llegar a un punto de encuentro antes de la formación de los nuevos ayuntamientos, fijada para el 15 de junio.