El concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, ha presentado el Plan de Seguridad Vial en el que se marcan las líneas de trabajo para que Valencia sea una ciudad más segura en materia de tránsito y reducir así la tasa de accidentalidad a la vez que se mejora la movilidad de los vehículos.
Así lo ha destacado Grezzi al dar a conocer este Plan que una vez apruebe la Junta de Gobierno establecerá estrategias a corto, medio y largo plazo para estar completamente activo antes de 2023.
“Hemos presentado un ambicioso Plan de Seguridad Vial, el primero con el que se dota Valencia, para avanzar en el objetivo de hacer una ciudad más segura, más amable y más accesible”, ha señalado Grezzi antes de explicar los ocho objetivos y las ocho líneas estratégicas a desarrollar en el Plan donde destaca un punto en concreto recogido en el diario Levante EMV: “la posibilidad de eliminar el estacionamiento de las vías principales con la finalidad de aumentar la capacidad y fluidez tanto del transporte público como de otros modos de transporte sostenibles”.
Es decir, con esta nueva medida la Concejalía de Movilidad conducida por Grezzi suprimiría el aparcamiento de coches de las avenidas más importantes y transitadas de Valencia. Unas vías cuyos nombres se desconocen todavía pero que acogiéndose a la característica señalada de “principales” podrían ser espacios como Blasco Ibáñez o Reino de Valencia. El Ayuntamiento destinaría el espacio de estacionamiento al uso de peatones, en el caso de ampliar las aceras, o al uso de autobuses y taxis e incluso bicicletas si se creasen carriles específicos.
Objetivos y estrategias clave en el Plan de Seguridad
La consultora CPS Ingenieros ha sido la responsable de elaborar este Plan de Seguridad Vial mediante una serie de encuestas y entrevistas con la finalidad global de reducir la accidentalidad y garantizar la movilidad segura de todos los usuarios del espacio público.
Esos objetivos se concretan en: reducir el riesgo de atropello a peatones, ciclistas y personas con diversidad funcional; reducir el riesgo de accidente de tráfico en intersecciones; combatir el exceso de velocidad en los desplazamientos; combatir la indisciplina en los semáforos; combatir el consumo de alcohol y drogas en la conducción; reducir el número de accidentes con conductores menores de 35 años; reducir el número de accidentes con vehículos a motor de dos ruedas y profundizar en el conocimiento de la accidentalidad urbana en Valencia.
Para cumplir estos objetivos entrarán en juego las ocho estrategias: mejorar las condiciones de seguridad de la movilidad peatonal; mejorar las condiciones de seguridad de la movilidad ciclista; mejorar la red vial urbana y calmar el tráfico en la ciudad; mejorar el control y vigilancia de la disciplina vial; mejorar los mecanismos de gestión de la seguridad vial municipal; mejorar la educación y formación en materia de seguridad vial; impulsar la participación y divulgación en seguridad vial y fomentar del uso de medios de transporte sostenibles.