Aún con la resaca fallera, la Semana Santa ya está a al vuelta de la esquina. Días festivos en los que se aprovecha para descansar, comer las tradicionales monas y longanizas de pascua y visitar lugares con encanto. La Comunidad Valenciana suele ser uno de los destinos turísticos más populares.

Por ello, te proponemos 5 escapadas para aprovechar durante la Semana Santa y vivir estas fiestas en enclaves maravillosos en las provincias de Valencia, Castellón y Alicante.

1. Xàtiva

Castillo histórico de Xàtiva.

La capital de la comarca de La Costera se ubica en el sur de la provincia de Valencia y está situado entre las cuencas del río Albaida y de su afluente, el río Cáñoles. A sus habitantes, se les conoce popularmente como «socarrats» porque Felipe V quemó la ciudad en 1707.

Uno de los lugares de obligada visita es su castillo, declarado Bien de Interés Cultural. Se trata de una doble fortaleza situada en la sierra del Castell. Dividido en el Castell Menor y Major, el primero se construyó sobre restos íberos y romanos. El segundo se alzó en época medieval, y cuenta con imponentes murallas.

2. Bocairent

La zona de cuevas artificiales cuenta con numerosas ventanas.

Enclavado en la comarca del Valle de Albaida, el municipio fue fundado por los romanos bajo el nombre de Bucarius y cuenta con diversos yacimientos prehistóricos en el término municipal.

Uno de los lugares más atractivos de la localidad es la zona conocida como «Les Covetes dels Moros», un sitio espectacular pero no apto para todos los públicos, pues para acceder se necesita cierto esfuerzo físico. Se trata de un grupo de cuevas artificiales situadas en el Barranc de la Fos, de la época hispano-árabe que servía como almacén colectivo.

3. Morella

Un pueblo valenciano es elegido entre los más bonitos del mundo

Uno de los lugares predilectos para visitar en Semana Santa, pues desde 2013 forma parte de la red de Pueblos más bonitos de España. Situado en la provincia de Castellón, es el tercer municipio en extensión de toda la Comunidad Valenciana.

Además se trata de un pueblo medieval, por lo que el paseo por sus calles es toda una experiencia, ya que se pueden contemplar sus murallas, el Castillo, el Convento de San Francisco y la Puerta de San Miguel. Además de que su gastronomía, basada en carne de caza, trufa negra y setas, no te dejará indiferente.

4. Villajoyosa

En Alicante, y situado en la Costa Blanca, es la capital de la comarca de la Marina Baja. Su casco antiguo se asienta sobre lo que fue un antiguo poblado ibérico y, en la época romana, la ciudad tomó el nombre de Alonis.

En Villajoyosa destaca la playa del Centro, las murallas renacentistas, la Torre de Sant Josep, el Santuario de la Malladeta o sus imponentes calas. Además, cuenta con museo del chocolate, pues gracias a su comercio marítimo se desarrolló la industria más típica de la zona: la chocolatera.

5. Castielfabib

Castielfabib

Constituye, junto con Ademuz, una de las dos villas históricas de la comarca del Rincón de Ademuz. Basada tradicionalmente en la agricultura y la ganadería, la localidad dispone de múltiples alojamientos rurales y arquitectura gótica declarada Bien de Interés Cultural de la Comunidad Valenciana.

Cuenta con una elaborada programación para Semana Santa, que comienza en Viernes Santo con la «cortá» y el traslado a hombros de dos chopos, que se plantan en la plaza, entre otros actos locales que hacen de Castielfabib un lugar único donde celebrar estas pascuas.