Adiós al botellón y al descontrol nocturno de los jóvenes. El Consell ha dicho basta a las fiestas en la calle a partir de este fin de semana. El objetivo es frenar una de las principales vías de contagio entre los jóvenes, la población más afectada por la quinta ola.
Este viernes la Generalitat modificará el Decreto-Ley del Régimen Sancionador para que el botellón pase a considerarse una «falta grave». Dicha modificación supone triplicar las multas encareciendo considerablemente su cuantía.
Con este cambio, los infractores que beban en la calle deberán hacer frente a unas multas que irán desde los 601 a los 30.000 euros. Con estas cantidades se pretende disuadir a los más jóvenes de esta práctica que ha tomado auge desde el fin del toque de queda.
Otra de las novedades será en lo referente a la venta de alcohol. El Consell va a modificar hoy la Ley de Sanidad de 2014, concretamente el punto de horarios. Así, a partir de ahora las grandes superficies comerciales y establecimientos de venta tendrán prohibido vender bebidas alcohólicas a partir de las 20:00 horas en lugar de a las 22:00 horas como está fijado actualmente.
Dicha medida también va enfocada a frenar los botellones y las fiestas de los jóvenes. Sin embargo, las terrazas y espacios hosteleros sí tendrán permitida la venta para consumo en local.