Cristina Pedroche se viste de metamorfosis y empieza el año calva. Por octavo año consecutivo ha conseguido sorprender y que la audiencia suba para descubrir cómo será su vestido. Y como siempre, nos ha dejado con la boca abierta para empezar el año. Ella misma lo ha calificado como «un insecto indefinido que está a punto de renacer». Apareció con un casco plata en la cabeza y zapatos del mismo color, vestida de metamorfosis.

El vestido pertenece al fallecido Manuel Piña, un diseño transparente, confeccionado en tafetán calado iridiscente. Tiene acabados metálicos y dos aros que aportan volumen geométrico a modo de caparazón del escarabajo.

Estas campanadas han sido un homenaje Manuel Piña, nadie esperaba que el traje más esperado fuera una pieza de museo. El vestido es de la colección primavera verano de 1991, la última colección presentada por Piña en la Pasarela Cibeles, que estaba inspirada en insectos y reptiles. La capa alada que llevaba estaba creada por Buj Studio y los zapatos y el casco plata creados por de Manuel Albarrán. El final sorprendió a todos al quitarse el casco y quedarse calva.