El temporal marítimo causado por la borrasca Blas continúa azotando la costa valenciana. Una de las imágenes más llamativas se ha visto en la localidad alicantina de Jávea. Allí una densa espuma blanca ha engullido las rocas de la playa dando la sensación de una nevada marina.
Según han recogido imágenes de À Punt, la espuma ha podido verse tanto en la zona de la cala Blanca como en el Segundo Montañar, es decir, la zona sur de Jávea.
El fenómeno, que ya ha podido verse en otras ocasiones, ha derivado del brusco temporal. En concreto, se trata de una de las principales consecuencias que se produce en las playas cuando hay fuertes rachas de viento y olas de grandes dimensiones.
LA BORRASCA BLAS ENGULLE LAS PLAYAS
Pero Jávea no ha sido la única localidad afectada por la borrasca Blas. Al margen del litoral norte de Alicante, la costa de la provincia de Valencia sigue en alerta amarilla. El brusco oleaje, que ha llevado a detectar una ola superior a los 6 metros, ha engullido algunas playas.
En la misma capital del Turia ha podido verse como el mar se ha comido gran parte de la orilla de las Arenas, una imagen similar a la de las playas de El Puig.
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— ValènciaWeather⚡️ (@Valencia_WX) November 10, 2021
En el caso de Cullera, la playa del Marenyet ha pedido la arena que ha quedado oculta bajo el mar. En el Brosquil ha sucedido igual. Esta playa contaba con una montaña de arena puesta por el Ayuntamiento de Cullera para suplir los daños del temporal Gloria y proteger a las viviendas y campos de sus alrededores. Sin embargo, la borrasca Blas ha terminado con ella y tendrá que volver a repararse.
El municipio de Gandía ha sido otro de los grandes afectados por la borrasca con más de 20 litros de lluvia registrados. Allí el fuerte oleaje ha obligado a cerrar el paseo del Espigón. Además, el nivel del mar también ha aumentado aunque no se han producido daños.