uvas

Existen varias teorías acerca de la costumbre española de tomar 12 uvas durante las 12 campanadas en Nochevieja. Aunque una de ellas asegura que todo comenzó en 1882, cuando un grupo de madrileños acudió a la Puerta del Sol para comer uvas durante las campanadas para ironizar a la burguesía, otros afirman que la tradición arrancó en el año 1909 al haber un excedente de uvas en Alicante al que hubo que dar salida vendiéndolas como «las doce uvas de la suerte».

Con el paso de los años la costumbre se asentó y se mantiene hasta día de hoy aunque ahora son otras las opciones que están tratando de imponerse como alternativa a la uva como es el caso de la mandarina.

Hace cinco años, en las Navidades de 2013, el Ayuntamiento de Castellón inició una campaña de promoción de estos cítricos valencianos con el fin de dar salida a estos productos y fomentar su consumo entre la sociedad española.

El consistorio repartió de forma gratuita miles de bolsas con «los 12 gajos de la suerte» e incluso envió bolsas a la Casa Real para tratar de impulsar dicha costumbre que ha continuado durante años posteriores aprovechando que es el mejor momento de la temporada.

Las campanadas de Valencia sonrarán dos veces en Nochevieja con una doble sesión festiva