Una empresa con sede en Valencia devolverá el dinero de los ERTE al sufrir menos de lo esperado

El confinamiento, el cierre de locales y la baja actividad económica han sido tres factores clave en la crisis del coronavirus. Ante esta situación son miles las empresas que han tenido que recurrir a los ERTE para hacer frente a la pandemia. Sin embargo, algunas han admitido experimentar un sufrimiento menor al esperado decidiendo devolver el dinero de los Expediente de Regulación Temporal de Empleo.

Ikea es una de las compañías que realizará esta devolución tras haber tenido a 8.725 empleados españoles en ERTE. Además, el gigante sueco no sólo pagará al Gobierno de España, también hará lo mismo en otros 8 países. Según publicó el Financial Times, los reembolsos se harán en Bélgica, Croacia, Estados Unidos, Irlanda, Portugal, República Checa, Rumanía y Serbia.

La empresa de decoración y mobiliario reincorporó a la totalidad de la plantilla de España el pasado 25 de mayo a pesar de seguir con las tiendas cerradas en gran parte del país. En palabras de Petra Axdorff, directora general de IKEA España, esta medida se tomó para «cuidar» de sus empleados.

«Con esta situación necesitamos más que nunca a nuestros trabajadores. En este tiempo le hemos dado una vuelta a aspectos que hasta ahora nos parecía imposible cambiar. Hemos demostrado que somos capaces de adaptarnos y de encontrar soluciones nuevas y solo gracias a todos ellos es posible», señaló.

UN ERTE CON AYUDAS

El ERTE de Ikea presentó además peculiaridades. Con el objetivo de «proteger a los empleados y al negocio» se creó un plan de medidas laborales. La empresa sueca asumió el compromiso de no realizar ningún despido. Además, completó los sueldos hasta la práctica totalidad para evitar problemas en las familias.

También se trabajó en un sistema de anticipos para compensar hipotéticos retrasos en el pago de parte del SEPE. A esto se sumó la activación de un sistema de atención personalizada. Este se destinó a todos aquellos que tuvieran dudas o consultas relacionadas con el ERTE.

Tras esto, Ikea firmó un acuerdo de adaptación de jornada dentro del acuerdo horario. Este estableció medidas como poder reducir la jornada temporalmente sin reducir salario o adaptar los turnos, entre otras medidas.  Por otro lado, la empresa anunció que el período de ERTE no afectará a las vacaciones anuales. Por tanto, las vacaciones ya planificadas y comunicadas serán inamovibles salvo mutuo acuerdo entre las partes.