Los afectados por el incendio comienzan a recibir las primeras ayudas económicas
Vecinos del barrio de Campanar pasean junto al edificio incendiado. / EFE

El trágico incendio de Campanar que acabó con la muerte de diez personas habría comenzado en la cocina de la puerta 86 por el fallo de un electrodoméstico en lugar del mecanismo de un toldo de la terraza como al principio se barajó.

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha sido la responsable de confirmar esta mañana la información durante un desayuno informativo celebrado en el hotel Las Arenas de Valencia.

Según ha avanzado Bernabé, el origen del incendio sería de carácter «fortuito» y por tanto se descartaría una responsabilidad penal. Con el nuevo avance de la investigación «se podrá hablar con todas las aseguradoras y hablar de todas las cuestiones para que los afectados puedan rehacer su vida».

La conclusión preliminar de la investigación policial ha descartado que el toldo eléctrico causase el fuego y señalan como origen la cocina de la vivienda 86. Bernabé ha declarado que «aparentemente» fue un electrodoméstico el que provocó las llamas. Además, se cree que habría sido la nevera.

Un cortocircuito del mecanismo del toldo podría ser el origen del gran incendio de Campanar
Ramos de flores a los pies de las viviendas incendiadas en el barrio de Campanar. / MANUEL BRUQUE (EFE)

EL INCENDIO MÁS GRAVE DE VALENCIA

El gran incendio de Campanar tuvo lugar el jueves 22 de febrero por la tarde. Las primeras imágenes de una terraza de la octava planta ardiendo salieron a la luz alrededor de las 17:30 horas. Pocos minutos después, el edificio completo estaba en llamas y se propagó al bloque anexo.

La magnitud del fuego, el viento y el tipo de fachada utilizada hizo que el incendio devorase todo el complejo residencial. El que ya está considerado como el incendio más virulento de la ciudad de Valencia provocó la muerte de diez personas, entre ellos una familia completa.

Además, las viviendas quedaron totalmente calcinadas y desde entonces los centenares de vecinos afectados residen en el complejo de Safranar habilitado por el Ayuntamiento de Valencia.