La Guardia Civil ha inmovilizado 80 toneladas de aceitunas y encurtidos en una empresa de Carcaixent. El gerente ha sido detenido tras distribuir productos no aptos para el consumo humano, y otro delito relativo al mercado y a los consumidores que ponen en riesgo la salud pública.
Fruto de la colaboración ciudadana, los investigadores tuvieron noticia de que podrían estar cometiéndose irregularidades en una empresa de productos alimentarios. En colaboración con la Consellería de Sanidad se ha realizado una inspección del delito.
Investigación del delito
Durante el registro se comprobó que en las instalaciones de la empresa se encontraban almacenados productos identificados como no aptos destinados al consumo humano. Estaban sin ninguna otra etiqueta, en latas oxidadas o con fechas de consumo recomendado sobrepasados ampliamente los cinco años. También se detectaron bidones identificados como «producto no apto».
Fruto de la investigación se verificó que la empresa mezclaba aproximadamente entre un 5% y un 10% de producto no apto para el consumo humano con otro sí autorizado.
Según un documento que portaba la empresa, el producto clasificado como “no apto” se tiene que destinar a eliminación a través de un gestor autorizado de residuos. No puede utilizarse en ningún caso para consumo humano ni animal.
En total, por estos hechos, se ha inmovilizado 80 toneladas de aceitunas y encurtidos. Asimismo, se ha arrestado al gerente de la empresa, un hombre de 42 años y nacionalidad española por el delito contra la salud pública y otro relativo al mercado y a los consumidores, al poner en riesgo la integridad de estos.
Alerta a nivel europeo
El producto final era distribuido para su comercio en el mercado mayorista, en restauración y tiendas. Además, también en grandes superficies tanto del mercado nacional (Cataluña, Comunidad Valenciana, Cantabria, Comunidad de Madrid, Andalucía, Islas Baleares, Murcia, Extremadura y Castilla-La Mancha) como de terceros países y algún otro de la Unión Europea.
Por consiguiente, la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha emitido una alerta rápida a nivel europeo a través del sistema RASFF (Rapid Alert System Feed and Food). Lo ha hecho con el objetivo de controlar los productos de esa empresa que se encuentran en circulación. La empresa se ha comprometido, de forma voluntaria, a la retirada del producto del mercado. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Alzira.