Desde que el coronavirus empezó a azotar a los grandes y pequeños comercios se preveía que las consecuencias económicas iban a ser desastrosas en España. Con el estado de alarma, las instituciones gubernamentales y privadas están trabajando para que la crisis económica que está por venir sea lo más leve posible.
Según el Fondo Monetario Internacional, en su último informe de abril, la economía española retrocederá un 8% en 2020. Esta tasa no se aleja mucho de otros países como Francia o Alemania. Además, la tasa de paro podrá alcanzar el 20 % de la población activa. Por su parte, el déficit público ocupará en torno al 10 % del Producto Interior Bruto (PIB).
Pero, ¿a qué se deben estos datos? Principalmente, al «frenazo» de la actividad en sectores directamente afectados por el confinamiento. Es decir, la restauración, la hostelería, el comercio, el ocio y el transporte. Estas actividades representan alrededor del 25 % del PIB en España. Estos sectores se ven afectados en la totalidad de la cuarentena. Sin embargo, también se debe tener en cuenta el parón de 15 días de la construcción o buena parte de la industria.
El sector turístico: el más afectado
El turismo es una de las actividades económicas principales de España. Por eso, va a ser uno de los sectores más perjudicados a medio plazo. Dependerá del ritmo al que se vaya a retomar la demanda. Pero también dependerá del proceso de recuperación de la confianza de las personas en volver a viajar.
Primero se retomará el turismo nacional, pero habrá que esperar para que la recuperación pase por el turismo internacional, ya que los movimientos de fronteras seguirán limitados este verano. Además, el hecho de que España sea uno de los países europeos más afectados también retrasa el fomento del turismo internacional.
Dentro de las malas noticias, la Comunitat Valenciana puede tener suerte en este sentido, ya que predomina el turismo nacional. En las provincias de Alicante y Valencia, más de la mitad de turistas son españoles, mientras que en Castellón supone el 83 %.
Aceleración de compra online y comercios de proximidad
El 54 % de los comercios al por menor permanecen cerrados en la Comunitat Valenciana por la crisis del coronavirus. La apertura de comercios debe ser paulatina, aunque sigue sobre la mesa la incertidumbre de los consumidores sobre los puestos de trabajo o la liquidez.
Es por esta incertidumbre que la compra online se disparará, como está ocurriendo durante el estado de alarma. Por eso, la Cámara de Comercio de Valencia recomienda que se impulse el poder adquisitivo del consumidor, garantizar la liquidez de los comercios o ayudar a las empresas minoristas a adaptarse a los nuevos hábitos de consumo.
Industria y construcción, de las más presentes en la C. Valenciana
Las empresas que activarán la recuperación económica son la de la alimentación, química, papel y energética. Están consideradas como esenciales, no han parado en cuarentena y suponen el 45 % de la industria valenciana. Sin embargo, las que más peso tienen en el PIB valenciano son las totalmente paralizadas, como el sector del automóvil o el cerámico.
Por su parte, la construcción ha sufrido una de las mayores caídas de afiliados a la Seguridad Social en marzo. Tras los 15 días de paralización, en la Comunitat Valenciana la actividad es progresiva. De esta manera, la construcción está ayudando a las empresas de materiales.
