El pequeño municipio de Sot de Chera, con 500 habitantes, intenta recobrar la normalidad tras la devastadora DANA que ha arrasado el sistema de puentes, infraestructuras y servicios esenciales. Tomás Cervera, alcalde de Sot de Chera, ha explicado a Ágora que se ha logrado un restablecimiento parcial de servicios básicos, como la electricidad, gracias al uso de generadores, mientras que el agua potable sigue sin acceso debido a la destrucción de las tuberías principales.

El desbordamiento del río destruyó todos los puentes y pasarelas que conectaban distintas áreas del pueblo. “Toda la infraestructura que habíamos desarrollado en 50 años desapareció en unas horas,” lamentó el alcalde. Sot de Chera, cuya economía depende en gran medida del turismo rural, enfrenta ahora el reto de reconstruir y reinventarse tras perder su principal atractivo natural.

Durante las labores de emergencia, el municipio ha dependido principalmente de la solidaridad de localidades vecinas y de un gran número de voluntarios. Cervera agradeció la ayuda de municipios cercanos como Llíria y Chulilla, aunque explicó que el flujo de voluntarios se ha tenido que organizar cuidadosamente para evitar saturaciones en las áreas afectadas. Equipos de vecinos y voluntarios han estado colaborando en tareas de desescombro, restablecimiento del agua y apoyo logístico a los damnificados.

Aunque la ayuda institucional ha comenzado a llegar con la presencia de brigadas y el ejército, Cervera insiste en que es fundamental que se implementen medidas a largo plazo para prevenir tragedias similares en el futuro en Sot de Chera. Además, ha pedido a las autoridades una revisión de la infraestructura de contención en la presa del Buseo, que lleva años sin las renovaciones adecuadas. «Queremos garantías de que no volveremos a vivir una catástrofe como esta,» afirmó el alcalde.