En el corazón de la Comunidad Valenciana, escondido entre las colinas y valles de la comarca de La Canal de Navarrés, se encuentra un paraje natural de impresionante belleza: El Salto de Chella. Esta maravilla de la naturaleza, con su imponente cascada de 25 metros de altura, es uno de los secretos mejor guardados de la región y un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura.
El Salto de Chella es más que una simple cascada; es un espectáculo natural esculpido por siglos de erosión y movimientos tectónicos. El agua del río Sellent, al precipitarse desde una altura considerable, ha creado un entorno de piscinas naturales, cuevas y formaciones rocosas que invitan a la exploración y el disfrute. El sonido constante del agua cayendo, la brisa fresca y la exuberante vegetación circundante conforman un oasis de tranquilidad y belleza.
Aquellos que buscan una experiencia de ecoturismo, han topado con el destino perfecto. Y es que, en el Salto de Chella pueden disfrutar de una variedad de actividades al aire libre, como senderismo, escalada, y fotografía de naturaleza. Los senderos que rodean la cascada ofrecen vistas panorámicas y oportunidades para avistar aves y otras especies autóctonas.
Para los más aventureros, la posibilidad de practicar barranquismo en las cercanías añade un extra de adrenalina. Las rutas bien señalizadas y la accesibilidad del lugar hacen que sea una excursión apta tanto para familias como para excursionistas experimentados.
Historia y Leyenda
La zona de Chella no solo destaca por su belleza natural, sino también por su rica historia. Los restos de antiguos molinos y acequias evidencian la importancia del agua para las civilizaciones que habitaron la región. Además, el entorno está cargado de leyendas locales que hablan de tiempos remotos, añadiendo un aura mística al lugar.
Una de las leyendas más populares cuenta la historia de una joven que, en tiempos de la Reconquista, se lanzó desde lo alto de la cascada para evitar caer en manos enemigas. Esta trágica historia ha dado al Salto de Chella un toque romántico y melancólico que perdura en la memoria de los lugareños.
Cómo Llegar
El Salto de Chella se encuentra a aproximadamente 70 kilómetros al suroeste de Valencia, lo que lo hace accesible en coche en poco más de una hora. La ruta más directa es a través de la A-35 y la CV-580, pasando por paisajes rurales y pintorescos pueblos que añaden encanto al viaje.
Al llegar a Chella, un corto paseo desde el centro del pueblo conduce a la cascada. La señalización es clara y el camino está bien acondicionado, lo que facilita el acceso incluso para los visitantes menos experimentados.
