El Consell aprueba la declaración de caducidad de la ATE del Valencia CF. Una posición que deja las manos libres al Ayuntamiento de Valencia y al Valencia CF para que puedan alcanzar un acuerdo que permita finalizar las obras del nuevo Mestalla.
El Pleno del Consell ha acordado este viernes, de acuerdo con el dictamen preceptivo favorable emitido por el Consell Jurídic Consultiu, la declaración de caducidad y la resolución anticipada de la ATE Valencia CF. El club pierde la condición de promotor del proyecto y se ordena iniciar el procedimiento de confiscación de la garantía presentada por parte de la Generalitat. La vicepresidenta Aitana Mas ha asegurado que “se mantienen todos los privilegios asociados».
Lay Hoon y el alcalde Joan Ribó se han reunido este viernes. Ribó ha informado de que a partir de ahora el Ayuntamiento preparará un borrador del nuevo marco jurídico que regirá la relación entre la administración local y el club deportivo y se convocarán los encuentros pertinentes para estudiar el texto.
En ese sentido, el máximo responsable municipal ha manifestado “la voluntad de que este campo se acabe de una vez, sobre todo con la perspectiva del Mundial de Fútbol de 2030”. Ahora bien, el alcalde ha insistido en que “no vamos a rebajar las exigencias de la ATE”. El estadio, ha señalado Ribó, debe tener capacidad para 70.000 asistentes; el polideportivo de Benicalap tiene que ser “del año 2022 con los precios de 2022”, y el acuerdo debe contemplar la instalación de placas fotovoltaicas para paliar la pobreza energética. “Es un paso de firmeza”, ha declarado el primer edil, “el València CF tiene que entender que debe cumplir estas condiciones de una vez por todas”.