La borrasca Filomena ha dejado nevadas gran parte de la Comunidad Valenciana. Casi la mitad de la provincia de Castellón y un tercio de la de Valencia se encuentran cubiertas por la nieve, según estima la Agencia Estatal de Meteorología. La borrasca y la nevada ha dejado incomunicada a la localidad de la Serratella, así como a partes de la Tinença de Benifassà.
Filomena se va y, en consecuencia, llega un anticiclón hará bajar significativamente las temperaturas. La nieve se convertirá en heladas estos días. Por ello, Aemet ha adelantado el aviso amarillo por temperaturas mínimas.
Ante esta situación, ayer permanecieron cerradas un total de 12 carreteras por nieve. Entre ellas la CV-125 y la la N-232. Además, en 65 carreteras era necesario el uso de cadenas; otras 75 estaban condicionadas y 12 presentaron incidencias.
A la situación del tráfico se sumó que 22.000 alumnos no pudieron asistir a clase este lunes. Según la Conselleria de Educación, fueron 33 los ayuntamientos que decretaron la suspensión de las clases en todos los centros educativos de su municipio.
Para este martes, el cielo de la Comunitat Valenciana estará despejado pero habrá heladas generalizadas, más fuertes en el interior y débiles en puntos de litoral.
