El Gobierno de Pedro Sánchez incluye en el Plan Presupuestario que ha enviado a Bruselas para 2021 la subida del IVA a las bebidas azucaradas del 10 al 21%. Los refrescos azucarados son las bebidas energéticas, los zumos envasados, los cafés, entre otros muchos productos.
Según datos de la Universidad Complutense de Madrid, en España se consumen anualmente alrededor de 2120 millones de litros de gaseosas y bebidas refrescantes. Además, el gasto anual de este tipo de bebidas es de más de 1600 millones de euros.
Las bebidas azucaradas se han asociado con el incremento de obesidad y sobrepeso a nivel mundial. Son muchos los estudios epidemiológicos que han encontrado asociación entre esta enfermedad y este tipo de bebidas. Aportan gran cantidad de calorías de alta disponibilidad. Además, el consumo de bebidas ricas en azúcares reduce la saciedad, haciendo que las personas consuman más calorías totales a lo largo del día
Hay estudios que muestran que niños con consumo habitual de bebidas azucaradas entre comidas tuvieron el doble de probabilidad de tener sobrepeso comparados con niños no consumidores. Por ello, con la subida del IVA lo que se pretende es reducir el consumo de este tipo de bebidas perjudiciales para la salud.