Los bares y restaurantes podrían prohibir fumar en sus terrazas próximamente
Una persona fuma en la calle durante la pandemia. / ALEX ZEA (Europa Press)

La ONG Nofumadores ha presentado ante el Ministerio de Sanidad cerca de 188.000 firmas, recogidas en su campaña ‘Terrazas sin humo ¡YA!. La petición reclama que todas las terrazas de hostelería, cubiertas o no, sean por ley libres del humo de tabaco y similares.

Desde 2006, el número de fumadores se ha estancado en España, mostrando en 25 años un tímido descenso de tan solo el 2%. Desde la reforma de la Ley del Tabaco en 2010, proliferaron las terrazas convirtiéndose en zonas de fumadores.

La medida de prohibir fumar en todas las terrazas cuenta con el apoyo del 72% de los españoles, según la encuesta realizada por la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria.

El humo del tabaco y los aerosoles de nicotina son altamente perjudiciales, y la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), estima que 2.250 personas mueren al año en España por tabaquismo pasivo. Los estudios han demostrado la existencia de una alta concentración de partículas cancerígenas en las terrazas donde se fuma, a pesar de estar abiertas.

La socialización en terrazas implica que más del 77% de la población se vea expuesta al humo de cigarrillos con el consiguiente riesgo para la salud, ya que, según la OMS, no existen niveles seguros de exposición.

En Valencia, el Ayuntamiento ya estudia prohibir fumar en algunos lugares públicos al aire libre para crear espacios libres de humo. Además, Compromís presentó el pasado mes de octubre una Proposición de Ley para prohibir el consumo de tabaco en terrazas, paradas de transporte público y eventos al aire libre dirigidos a menores.

Que beneficios supondrán las terrazas sin humo

Principalmente las terrazas sin humo protegerán la salud tanto de clientes como de trabajadores de hostelería que tendrán menor absentismo laboral producido por enfermedades causadas por el humo.

Por otra parte, la desnormalización del consumo de tabaco y nicotina, en el principal espacio de socialización de los españoles, tendrá una gran labor ejemplarizante para las nuevas generaciones que aprenderán que lo normal es no fumar.

Además, ayudará a dejar de fumar a ese 70% de fumadores que quiere dejar de serlo, ya que la presencia de cigarrillos encendidos en las terrazas tiene implicaciones negativas para quienes tratan de dejar la adicción. Raquel Fernández afirmó que “en las terrazas de hostelería mueren los intentos de dejar de fumar de muchas personas, expuestas tanto al tabaco de otros como a la presión grupal de otros fumadores”.

La hostelería experimentará ventajas adicionales, ya que sus gastos de limpieza disminuirán. Además, la inversión realizada en la construcción de terrazas fijas ha significado un beneficio añadido para sus negocios, al suponer la ampliación significativa de la superficie de sus establecimientos, ocupando la vía pública.

Nofumadores, en la línea de la OMS, defiende que la extensión inaplazable e ineludible de los espacios sin humo tiene que venir acompañada de otras medidas como el aumento de precio de la cajetilla, el empaquetado genérico y la disminución de los puntos de venta. «Sobran todas las máquinas expendedoras de tabaco, las cuales están mayoritariamente situadas en la hostelería», señalan desde la ONG. Otros países como Portugal y Nueva Zelanda proyectan acabar con el 90 por ciento de los puntos de venta de tabaco.