ERE
Oficinas del Banco Santander en el centro de Valencia.

El Banco Santander ha sido víctima de un ciberataque masivo que ha afectado tanto a clientes, empleados e incluso exempleados. La entidad bancaria liderada por Ana Botín ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la detección de un «acceso no autorizado» a una base de datos que se alojaba en un servidor gestionado por uno de sus proveedores.

El alcance del hackeo ha llegado hasta empleados y exempleados de toda la entidad, exceptuando a los de Alemania. También contiene información de clientes de España, Chile y Uruguay. Además, han destacado que en el resto de mercados de la entidad no hay datos de clientes afectados.

Desde el Santander han señalado que «en la base de datos no hay información transaccional ni credenciales de acceso o contraseñas de banca por internet que permitan operar con el banco». «Las operaciones y los sistemas de Santander no están afectados y los clientes pueden seguir operando con seguridad«, apuntan.

Según han avanzado, el banco está investigando lo sucedido. Nada más detectarse el incidente, se establecieron «de inmediato» medidas para solventar el hackeo. Entre ellas, se bloqueó el acceso a la base de datos y se reforzó la prevención contra el fraude.

La entidad ha lamentado la situación y ha avanzado que ya se está informando «proactivamente» a todas las personas afectadas. «Hemos notificado oportunamente a reguladores y fuerzas de seguridad, y continuaremos colaborando con ellos», concluye el comunicado.