El Arzobispado de Valencia va a iniciar la investigación de un profesor que habría estado sometiendo a estudiantes homosexuales a terapias de reconversión sexual. Estas prácticas ilegales se habrían realizado en el Centro de Orientación Familiar (COF) Madre Josefa Campos de Alaquàs por parte de su director a cinco alumnos.
«Ante las informaciones aparecidas en los medios de comunicación, el Arzobispado de Valencia declara que no ha llegado ninguna queja de personas que hayan sido atendidas en el Centro de Orientación Familiar (COF)», arranca el comunicado. «A pesar de que no consta que se hayan realizado prácticas de este tipo, ante estas noticias, el Arzobispado realizará una investigación sobre las actuaciones que se han conocido«.
El escrito también recuerda que ante entidades como el COF, el Arzobispado no dispone de poder ejecutivo y su única misión es «acompañar» a nivel espiritual en la pastoral familiar. «No es un organismo oficial de la Diócesis. Es una asociación pública de fieles, que tiene sus propios estatutos. Aunque este tipo de asociaciones tienen un consiliario, este no tiene potestad ejecutiva. Su misión es acompañarlos espiritualmente en la pastoral familiar».
PASTILLAS PARA «CURAR LA HOMOSEXUALIDAD»
Desde la Conselleria de Educación también se ha abierto una investigación al respecto con el fin de esclarecer los hechos denunciados por los cinco alumnos. Al parecer, el hombre que llevaba tres décadas ejerciendo como profesor y dirigía el COF de Alaquàs trataba de convencer a sus estudiantes homosexuales para que visitasen el centro que llevaba en funcionamiento desde 2014.
Según adelantaba este fin de semana el diario Levante EMV, los jóvenes denunciantes han explicado que el profesor les abordaba con preguntas sobre su condición sexual y siempre a solas. Además, uno de ellos ha llegado a afirmar que el docente también le había ofrecido unas pastillas para «curar la homosexualidad».
El hombre les remitía al centro Mater Misericordiae para someterse a prácticas de reconversión sexual en el COF. Según indica la página web del sitio, este es «un servicio especializado de atención integral a los problemas familiares en todas sus dimensiones».
EL COF DE VALENCIA HA ATENDIDO A MÁS DE 350 PERSONAS
Entre los objetivos del COF están «acoger, ayudar a discernir y acompañar a las personas o matrimonios que tienen o han tenido sufrimientos en las relaciones interpersonales o en su proceso de maduración».
Tal y como indica un comunicado del Arzobispado correspondiente al pasado mes de febrero, el equipo de este centro está formado por 15 profesionales, entre ellos varios matrimonios que trabajan de forma voluntaria. «Entre ellos figuran orientadores familiares, psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales, enfermeros, médicos y juristas», señalan.
Desde su apertura en Valencia en 2014, por el COF han pasado ya 350 personas y atiende cerca de 40 nuevos casos al año.
Cabe recordar que las terapias de aversión están prohibidas desde la aprobación de la Ley Valenciana LGTBI que en su artículo 7 establece la prohibición de «la práctica de métodos, programas y terapias de aversión, conversión o contra acondicionamiento destinadas a modificar la orientación sexual, la identidad de género o la expresión de género de las personas». Su práctica se considera una falta muy grave según la propia ley, así como la Ley estatal LGTBI aprobada posteriormente.