Detenido un grupo violento juvenil que actuaba con riñas tumultuarias y robos con fuerza en Valencia
Agente de la Policía Nacional en una imagen de archivo.

La Policía Nacional ha detenido a un joven americano, estudiante en Valencia, al que se le acusa de cometer cuatro agresiones sexuales en una residencia universitaria de la ciudad. Las denuncias fueron interpuestas por cuatro residentes, quienes alegan haber sufrido diferentes formas de coacción y abuso entre los meses de septiembre y octubre de este año.

Según ha adelantado el diario Levante EMV, dos de las víctimas declararon que las agresiones incluyeron acceso carnal en situaciones donde el consentimiento podría haberse visto condicionado por el consumo de alcohol o por la presión psicológica ejercida por el sospechoso. Las otras dos denunciaron episodios de tocamientos y conductas sexuales inapropiadas, a pesar de haber manifestado su incomodidad.

Las denunciantes, de entre 18 y 26 años, compartieron inicialmente su experiencia en privado. Algunas evitaron denunciar al considerar que los episodios eran aislados o debido al sentimiento de culpa común en víctimas de agresión sexual. Sin embargo, tras conocer que otras compañeras habían vivido situaciones similares, decidieron informar a los responsables de la residencia, lo que culminó en la intervención policial.

El acusado fue puesto a disposición judicial el viernes. El Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia ha decretado su libertad con cargos. También se han establecido medidas de alejamiento de 50 metros respecto de dos de las víctimas y su expulsión de la residencia universitaria. Aunque la gravedad de las acusaciones ha generado preocupación, no se le ha retirado el pasaporte, permitiéndole permanecer en libertad mientras avanza la investigación.

UNA AGRESIÓN SEXUAL IMPLICA A UNA JOVEN CON AUTISMO

El joven habría negado las acusaciones, afirmando que las interacciones fueron consentidas. Argumentó ante el juez que solo hubo besos y «frotamientos sexuales» con permiso de las denunciantes. Sin embargo, una de las víctimas relató que el agresor utilizó la fuerza durante un encuentro sexual. Al parecer, este llegó a sujetarla con violencia de las muñecas pese a sus intentos de detenerlo.

Otro de los casos involucra a una joven de 26 años con autismo, quien fue engañada con la excusa de recibir un masaje. El agresor realizó gestos sexuales cuando la chica estaba desnudaba de cintura para arriba, a pesar de la incomodidad explicada por la víctima. También otra denunciante de 19 años señaló haber sido presionada con comentarios inapropiados sobre su origen étnico y, tras negarse inicialmente, sufrió una presunta violación.