AFPEM Horta Sud
Diferentes personas en el taller de agricultura de AFPEM Horta Sud

En la ciudad de Albal, entre mesas de cultivo y el murmullo de la huerta valenciana, un grupo de personas encuentra cada mañana un espacio de compañía, aprendizaje y esperanza con la Asociación AFPEM Horta Sud.

La entidad sin ánimo de lucro trabaja por la inclusión social y la rehabilitación psicosocial, y ha convertido el cultivo ecológico en una herramienta terapéutica que ayuda a sanar las heridas invisibles que dejó la DANA y que todavía marcan la vida de muchos vecinos.

Una huerta como terapia

“Antes teníamos el huerto en tierra, pero con la DANA se inundó la zona y ya no nos atrevemos a plantar allí”, explica David Arocas, técnico de la asociación. “Por eso hemos comprado mesas de cultivo, para mantener el mismo taller y que no se pierda un recurso tan valioso para ellos”.

El cambio de formato no ha restado entusiasmo. Muy al contrario, los participantes disfrutan plantando lechugas, verduras y especias, que después aprovechan en casa o en un taller de cocina comunitario en el mercado de Catarroja.

“Esto nos sirve de entretenimiento y de ayuda. Pasamos la mañana entretenidos y en buena compañía, y además nos llevamos a casa algo que hemos cuidado con nuestras propias manos”, comenta Pedro González, uno de los usuarios mientras muestra orgulloso las hileras verdes que crecen en su mesa de cultivo.

Una familia frente a la soledad

Los testimonios coinciden en señalar que el verdadero valor del proyecto va más allá de la huerta. “Aquí no estamos aislados. Somos como una familia. Venimos por la mañana, trabajamos juntos, aprendemos… y lo más importante, no nos sentimos solos”, asegura Isabel Garrido otra de las asistentes a los talleres.

La soledad es, precisamente, uno de los problemas más graves que enfrentan muchas personas con trastornos mentales. “Nadie quiere sentirse solo, nadie quiere estar solo. Pues aquí es donde hay que venir”, añade Isabel con firmeza.

El equipo técnico de la asociación confirma que el impacto de estos talleres es profundo. “Son dinámicos, les gusta mucho participar y les viene muy bien para salir de casa, relacionarse y sentirse activos”, señalan.

Los talleres fomentan el trabajo en equipo y la socialización
Los talleres fomentan el trabajo en equipo y la socialización

Una comunidad que florece con AFPEM Horta Sud

Desde AFPEM Horta Sud, la misión es clara, acompañar a las personas diagnosticadas con trastorno mental grave hacia una recuperación integral. No se trata solo de aliviar síntomas, sino de ofrecer apoyo para que cada individuo pueda retomar su plan de vida.

Lo que en apariencia puede ser un simple taller de huerta, en realidad es mucho más, es un espacio donde se construyen vínculos, se recupera la autoestima y se cultiva la esperanza.

Cuantos más proyectos como este haya en el mundo, mejores seremos como sociedad”, resumen los participantes convencidos de que el cultivo no solo da frutos en la tierra, sino también en la vida de quienes lo cuidan.