«Todavía nos quedan muchas cosas por mostrar juntos”, le trasladó el presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, al director de la Vuelta, Javier Guillén, el pasado mes de julio durante la presentación en Llíria de las etapas valencianas de la ronda ciclista, que hoy llega a la provincia con el ascenso a los puertos de la Chirivilla, el Oronet y el Garbí y meta en el Puerto de Sagunto.
Los responsables de la Diputación de Valencia, con Rodríguez a la cabeza, ven en la Vuelta no solo un evento deportivo que garantiza el espectáculo, sino una potente herramienta de vertebración del territorio, de unas comarcas valencianas que pueden vender sus encantos en un escaparate televisivo con 40 canales que dan señal a cerca de 200 países.
Con esta idea se cerró el acuerdo para que la Vuelta 2016 contara con la etapa Requena-Gandía, que atravesó la provincia del interior a la costa dejando un retorno económico de alrededor de 500.000 euros en los municipios por los que pasó la carrera, en especial los puntos de salida y llegada. Y con el mismo espíritu se ha consolidado la presencia del evento deportivo en tierras valencianas, en una edición de 2017 que entrará a la provincia por el alto de la Chirivilla, bajando por Gátova y Olocau, y la abandonará por Los Serranos, rumbo a Cuenca.
En palabras del presidente de la Diputación, que vuelve a apostar por invertir en la ronda ciclista para que la serpiente multicolor atraviese un año más las carreteras valencianas, “la consolidación de la Vuelta en nuestra provincia es un paso más en el acercamiento de esta institución hacia las comarcas, que estamos llevando a cabo no solo en el ámbito de la gestión y los servicios, sino también a través de proyectos culturales y eventos deportivos”.
El presidente provincial añade que las cifras de la Vuelta justifican la inversión realizada por las áreas de Deportes y Turismo, ya que “pocos acontecimientos tienen la capacidad de difundir los tesoros turísticos de nuestras comarcas con 3 horas de retransmisión en directo por televisión”. Rodríguez ha puesto en valor la capacidad de organización de los responsables de la Vuelta y ha dejado las puertas de la provincia abiertas a la carrera, por su capacidad para vertebrar y ofrecer los atractivos de las comarcas valencianas al mundo.
Una ventana al mundo
La sexta etapa de la Vuelta 17, entre Vila-real y Sagunt, presenta un recorrido de 204 kilómetros, con la ascensión a los puertos de la Chirivilla, el Oronet y el Garbí y el paso por los términos de Gátova, Olocau, Bétera, Náquera, Serra, Torres Torres, Segart, Algimia de Alfara y Estivella. La séptima etapa partirá desde Llíria rumbo a Cuenca, y el pelotón atravesará o pasará junto a otros municipios de la provincia como Domeño, Casinos, Losa del Obispo, Calles, Chelva, Tuéjar, Titaguas y Aras de los Olmos. La línea de meta estará ubicada en Cuenca tras recorrer 205 kilómetros en la etapa más larga de la Vuelta.
El director de la Vuelta considera “muy enriquecedoras” las etapas de Sagunt y Lliria, que “se empezaron a gestar nada más terminar la etapa Requena-Gandía del año pasado y creemos que vertebran bien los municipios valencianos, ya que vamos más allá de una prueba con 198 corredores que buscan la victoria y tratamos también de vender territorio”. Guillén ha anunciado las novedades en la cobertura de la carrera, una ventana al mundo que “esta vez cuenta con dos helicópteros, uno para recoger con tomas áreas los encantos turísticos de los municipios”. Los datos de audiencias del pasado año, con 1,5 millones de espectadores por etapa y 364 millones de espectadores de 190 países en total, demuestran el potencial de este proyecto deportivo y turístico “global”.