El Consorcio Provincial de Bomberos ha tenido que actuar ante la inundación de garajes en Catarroja
El Consorcio Provincial de Bomberos ha tenido que actuar ante la inundación de garajes en Catarroja

La lluvia caída durante la la pasada noche ha vuelto a poner en alerta a la denominada zona cero de la DANA de octubre de 2024, especialmente en municipios de l’Horta Sud como Paiporta, Catarroja, Alfafar y Benetússer. Aunque sin alcanzar niveles catastróficos, las precipitaciones han reavivado el miedo entre los vecinos y han provocado incidencias, inundaciones puntuales y nuevas críticas por la lentitud de la reconstrucción.

El Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia ha intervenido desde primeras horas de la noche para paliar los efectos del episodio de lluvias, registrándose una docena de avisos, la mayoría en Catarroja, donde se concentraron actuaciones de bombeo de agua en garajes y drenaje en la vía pública. También se actuó en otros puntos de l’Horta Sud afectados por acumulaciones de agua.

En Paiporta, la localidad más golpeada por la DANA, la lluvia ha caído de forma persistente durante toda la madrugada, provocando inundaciones puntuales en algunos puntos del municipio tras decretarse la alerta naranja pasadas las 23h.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por 7 TeleValencia (@7televalencia)

El barranco del Poyo ha llevado agua durante toda la noche, aunque con un caudal considerado normal, lejos de los niveles que harían temer un desbordamiento. Aun así, su sola imagen basta para activar los recuerdos del desastre.

Obras pendientes en el alcantarillado

La situación se agrava en los puentes sobre el barranco del Poyo, aún en obras y con itinerarios peatonales improvisados. Aceras levantadas, charcos y barro hacen que muchos vecinos lleguen a su destino con los pies empapados.

En Catarroja, especialmente en los barrios más afectados hace algo más de un año como les Barraques, las lluvias han vuelto a provocar desbordamientos del alcantarillado. Según la estación meteorológica municipal, se registraron 66,6 litros por metro cuadrado, con 15,8 l/m² en solo diez minutos, una intensidad que ya es considerada como torrencial. Esto obligó al cierre de túneles y calles, así como a movilizar a equipos municipales y servicios de emergencia.

Las plataformas vecinales alertan del agotamiento psicológico y la falta de soluciones estructurales. Advierten de la falta de medidas rápidas y reclaman una intervención urgente de las administraciones supramunicipales.

Un año después de la DANA, la lluvia sigue siendo sinónimo de miedo, indignación y sensación de abandono en l’Horta Sud. Y cada nuevo episodio vuelve a abrir una herida que aún está lejos de cerrarse.