
Tras la tormenta llega la calma. La alerta roja, por lluvias torrenciales en la Comunitat Valenciana, ha pasado a ser amarilla. Y ahora, junto a muchos otros problemas derivados del día de ayer, el Valencia Basket y el Levante UD tienen que buscar nuevas fechas para jugar los partidos que el agua no permitió.
Los conjuntos valencianos ahora tienen que pactar con los respectivos equipos afectados, y las asociaciones encargadas de cada una de sus competiciones, cuándo podrán celebrarse los enfrentamientos ligueros que quedaron aplazados el domingo.

Un calendario donde no cabe ni medio alfiler
El Valencia Basket es el conjunto más perjudicado, debido al apretadísimo calendario de los taronja. Los hombres de Pedro Martínez tienen esta semana, sin ir más lejos, dos partidos de Euroliga y uno de liga.
Así que el no poder defender su posición de líder en el Roig Arena ayer, aunque sirvió para que descansara la plantilla, va a generar estrés en las oficinas del club. La dirección tendrá doble trabajo, pues el conjunto femenino tampoco pudo disputar su encuentro.
Las conversaciones con el Casademont Zaragoza, rival que compartían el equipo masculino y femenino; la FEB (Federación Española de Baloncesto) y la ACB (Asociación de Clubes de Baloncesto) han empezado ya en busca de encontrar un hueco en el calendario que contente a todos.

Menos plazo pero más margen
Los granota, por su parte, tienen un calendario algo más holgado. Por ahora se prevé una reubicación diligente para el derbi de la comunitat. La RFEF (Real Federación Española de Fútbol) ha dado un plazo de cinco días a los clubes para acordar la nueva fecha.
Aún no está confirmado cuándo se producirá la visita del Villareal al Ciutat de València, según LALIGA. La opción más probable es que se acomode el 7 o el 8 de enero, aunque también se baraja el Día de Reyes.
No obstante, esto obligaría a adelantar el duelo levantinista en el Sánchez-Pizjuán, programado para el 4 de enero. LALIGA ha informado al respecto que, pese a no estar confirmada aún, la nueva fecha y hora “se comunicará en breve”.

Un aplazamiento ineludible
La alerta roja por lluvias torrenciales, superiores a 180 litros por metro cuadrado en 12 horas, que declaró la AEMET para la segunda mitad del domingo hacía imposible la celebración de estos encuentros.
El Ayuntamiento solicitó a los clubes, y las respectivas asociaciones y federaciones, los aplazamientos. Además, la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana suspendió todos los encuentros para la jornada dominical.
Esto llega tras la reciente rencilla entre María José Catalá y Javier Tebas. La alcaldesa de Valencia mandó una carta al presidente de LALIGA con tal de cambiar el horario del Valencia-Sevilla de la semana pasada. No obstante, en aquella ocasión el abogado se negó.
La propuesta vino motivada por el colapso que se produciría en la ciudad derivado del maratón. “El aficionado debería ser el centro de la atención, que no lo es, que son los derechos televisivos, y a mí me parece triste”, ha criticado Catalá sobre la decisión del dirigente.












