El Gran Circo Alaska vuelve a levantar su carpa para sumergir al público en un universo azul lleno de magia, fantasía y emoción. Su nuevo espectáculo, “La Sirenita”, es una adaptación circense del célebre cuento. Este combina artes escénicas, música, acrobacias y una cuidada puesta en escena diseñada para hacer vibrar a espectadores de todas las edades. Tras el éxito de sus reinterpretaciones de “El Rey León”, “Aladdín” y “La Bella y la Bestia”, la compañía apuesta una vez más por llevar grandes historias al lenguaje del circo contemporáneo.
Bajo un océano de luces azules y destellos plateados, la función arranca en las profundidades marinas, donde una joven sirena sueña con conocer el mundo exterior. Su espíritu curioso la conduce a un encuentro decisivo con un príncipe humano que naufraga entre las olas. A partir de ese instante, el espectáculo se transforma en una travesía cargada de emociones, desafíos y deseos de libertad.
Un espectáculo narrado con el cuerpo
“La Sirenita” prescinde de las palabras y confía su narración a un repertorio visual que mezcla disciplinas como las acrobacias aéreas, la danza acuática, los malabares y coreografías que evocan el movimiento ondulante del mar. Las telas, los aros y las cuerdas se convierten en corrientes marinas; los juegos de luces, en destellos que envuelven al público; y la música, en la voz íntima de la protagonista.

Cada número está diseñado para trasladar al espectador a un entorno submarino donde los personajes flotan, vuelan o se deslizan. Así como si formaran parte de un ecosistema vivo. La emoción del clásico de Andersen se reinterpreta desde el ritmo, el gesto y la potencia física del circo moderno.
La fantasía como sello del Gran Circo Alaska
Con este estreno, la compañía reafirma su sello: unir grandes historias universales con disciplinas circenses de alto nivel para crear experiencias inmersivas y familiares. “La Sirenita” propone un viaje poético en el que el amor, la libertad y la búsqueda de identidad se narran a través del movimiento y la espectacularidad visual.
Un show pensado para sorprender a niños y adultos que busquen un plan cultural distinto y lleno de magia. Bajo la carpa del Gran Circo Alaska, el mar cobra vida… y la fantasía también.














