Lorena Sopêna / Europa Press

La madrugada de este miércoles ha dejado una imagen difícil de olvidar. La aurora boreal, un fenómeno típico de las latitudes más altas del planeta, ha podido observarse de nuevo sobre el cielo valenciano, tiñendo el horizonte de tonos rojizos y violáceos poco antes del amanecer.

Desde las 4:00 horas, las webcams de Forcall, Torralba del Pinar, Vilafranca y Puebla de Arenoso registraban con claridad las luces del norte reflejándose sobre el cielo del interior de la Comunitat Valenciana. El fenómeno, captado también por numerosos aficionados a la astronomía, supone la tercera vez en el último año y medio que se observa una aurora boreal en la región.

Aunque las auroras son más frecuentes en el norte de Europa como en Escandinavia, Islandia o Escocia, una tormenta geomagnética severa ha permitido que el espectáculo se extendiera hasta el este peninsular. Según los expertos, se trata de una tormenta de categoría G4, una de las más intensas registradas este año, causada por una eyección de masa coronal procedente del Sol.

Las condiciones atmosféricas han favorecido su visibilidad en zonas con baja contaminación lumínica, especialmente en áreas rurales del interior de Castellón, donde la claridad del cielo permitió disfrutar del fenómeno a simple vista.

En la costa, el brillo urbano impidió apreciarlo con igual intensidad, aunque algunos observadores reportaron un resplandor rojizo tenue en el horizonte norte desde Sagunt y la zona alta de València.

También visible en otras regiones

El fenómeno no se ha limitado a la Comunitat Valenciana. Las auroras han sido visibles esta madrugada desde buena parte del país, con imágenes espectaculares en Madrid, Almería, Galicia y Extremadura, y hasta en el sur peninsular, algo extremadamente raro.

Observatorio de Calar Alto (Almería)

En el resto del mundo, el resplandor boreal se ha extendido por gran parte de Europa y Norteamérica, con observaciones confirmadas en Francia, Alemania y varios estados del sur de EE. UU., incluyendo Texas y Florida.

Un fenómeno que podría repetirse

Los astrónomos señalan que el ciclo solar actual se encuentra en su punto máximo, lo que incrementa la probabilidad de tormentas geomagnéticas intensas durante los próximos meses.

Para poder observarlas, recomiendan buscar lugares elevados y alejados de la contaminación lumínica, y mirar hacia el norte en las horas más oscuras de la madrugada.