Apenas han pasado unos días desde aquella tarde mágica en que la alcaldesa de Valencia pronunció su nombre, pero Marta Mercader Roig aún siente que vive dentro de un sueño. “No me lo creo para nada”, confiesa entre risas y con esa naturalidad que ha conquistado a todo el mundo fallero.
La llamada llegó como un rayo de sol. Marta recuerda entre risas el momento de la llamada como uno de los más nerviosos y a la vez más bonitos de su vida, pero también inesperado. Explica que tenía el móvil en el suelo y de golpe empezó a sonar pero la alcaldesa no pronunciaba su nombre: «No lo entendía, sonaba el teléfono pero no decían nombre».
Al finalmente ya escuchar su nombre en televisión y confirmar que era la elegida, ya no pudo contener el llanto. “Me puse a llorar muchísimo. Fue un momento súper emocionante y alegre. No me lo esperaba para nada”, recuerda con los ojos brillantes. En el casal, la alegría fue indescriptible: gritos, aplausos, abrazos infinitos y una niña que saltaba, reía y no podía creer que, de repente, era la Fallera Mayor Infantil de Valencia 2026.
Su madre, entre sorpresa y emoción, repetía una y otra vez: “Madre mía, Marta, que no me lo creo”. Sus hermanos aún la miran con asombro, y sus primas fueron las primeras en abrirle un club de fans, que ya crece cada día en redes. “Mis primas me dijeron: ‘Te vamos a hacer un club de fans’, y yo les dije: ‘Vale, me parece bien’. ¡Y ahí sigue!”, cuenta riendo.

Marta es amante de la indumentaria valenciana. En la entrevista explicó los detalles del traje que lució en su exaltación, acompañado de un aderezo de Paco Artola y peinetas de Flor de Cotó, con el escudo de Valencia como detalle. “Me encanta vestirme de valenciana, ver las telas, los colores, los aderezos… todo”, explica entusiasmada.
Junto a Carmen Prades, Marta forma parte de un año que ya se conoce como el año del sol eterno, porque el día de su nombramiento, justo cuando sonó la llamada, cesó la lluvia y apareció el sol. “Fue como una señal. Hemos dicho que somos el año del sol”, bromea feliz.
Marta se aprende los bailes de TikTok en segundos
Detrás de la Fallera Infantil de Valencia hay una niña de sonrisa fácil, que baila TikToks con sus amigas. «Me aprendo los bailes de TikTok a los segundos», asegura Marta. Además, saca su lado más emocional cuando recuerda a su familia de Foios, el pueblo de su abuelo. “Me gusta ir allí, ver la casa y recordar que ahí ha estado mi familia. Es muy bonito”, dice con ternura.
Marta Mercader no solo representa a las niñas de Valencia, sino también a la inocencia, la alegría y el amor por la fiesta. “Esto pasa en un abrir y cerrar de ojos, dice, así que hay que disfrutar cada segundo.” Y lo hará: con su sonrisa luminosa, su dulzura infinita y esa magia que solo las verdaderas falleras infantiles saben transmitir.













