La Comunitat Valenciana sigue bajo la influencia de los restos del huracán Gabrielle, que en las últimas horas ha dejado un nuevo episodio de precipitaciones intensas. Sin embargo, a diferencia de la jornada anterior; cuando la Safor y la Ribera Baixa sufrieron inundaciones y problemas generalizados; esta madrugada las lluvias se han concentrado en la comarca de l’Horta Sud y en el área metropolitana de València, con registros notables pero sin consecuencias graves.
El punto donde más ha llovido ha sido Massanassa, con 55,0 litros por metro cuadrado recogidos en el IES Massanassa, seguida de Catarroja (Colegio Larrodé) con 54,4 litros.
Muy cerca se sitúan Meliana, con 50,0 litros, y Quartell, que alcanzó 49,6 litros. También destacan los acumulados de Almàssera y Catarroja (Ayuntamiento), ambos con 46,2 litros, y las dos estaciones en la ciudad de València: Districte Marítim (45,0 litros) y Penya-roja (43,4 litros).
En el entorno metropolitano, Picanya (42,4 litros) y Aldaia (40,6 litros) completan un episodio de precipitaciones que, si bien ha sido persistente y generalizado en la zona, no ha derivado en anegamientos ni desbordamientos reseñables.
Un territorio marcado por la memoria reciente
La lluvia intensa de esta noche ha puesto de nuevo el foco sobre l’Horta Sud, una comarca especialmente vulnerable a los temporales tras el grave episodio de la DANA del año pasado, que provocó inundaciones en múltiples municipios.
En esta ocasión, las precipitaciones han caído en abundancia, pero más repartidas en el tiempo, lo que ha permitido que la red de drenaje asumiera mejor el agua caída.
Rebaja del nivel de alerta
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha rebajado el nivel de aviso en el litoral de València, que pasó de rojo a naranja esta noche, y descenderá a amarillo a partir del mediodía. La decisión se tomó al observar una disminución en la virulencia del temporal, que ayer descargó con violencia en la Safor y la Ribera, pero que durante la noche se desplazó hacia el área de l’Horta con menor impacto.
Aemet advierte, no obstante, que todavía pueden producirse chubascos localmente fuertes en las próximas horas, aunque sin la persistencia ni la intensidad de los episodios anteriores. La situación meteorológica tiende a estabilizarse progresivamente, pero la atmósfera aún mantiene un alto grado de inestabilidad ligado al paso de Gabrielle por el Mediterráneo.
De la Safor a l’Horta: cambio de escenario
El temporal ha dibujado un mapa cambiante en apenas 24 horas. Si ayer la Safor y la Ribera Baixa se llevaban la peor parte con registros de más de 220 litros en Gandia y desbordamientos en varios puntos, esta madrugada la actividad se ha desplazado hacia el norte, afectando con más claridad al entorno metropolitano de València. La magnitud es notable, con acumulados de hasta 55 litros, pero la ausencia de inundaciones generalizadas confirma que la situación, aunque seria, ha evolucionado de manera menos dramática que en las comarcas vecinas.
Con esta evolución, el litoral valenciano encara el final del episodio con cierta calma, aunque las autoridades insisten en mantener la prudencia y seguir de cerca las indicaciones oficiales, puesto que el riesgo no ha desaparecido por completo.
