El Centre del Carme Cultura Contemporània (CCCC) abre el 18 de septiembre la exposición “Alteración del orden” de la artista Mavi Escamilla. La muestra estará disponible hasta el 30 de noviembre en la sala Dormitorio del centro.
El director del Consorci de Museus, Nicolás Bugeda, y la propia pintora presentaron la propuesta en València. En este encuentro explicaron los ejes principales de la exposición.
La muestra reúne pinturas de los años noventa y también trabajos recientes. Además, incluye la primera incursión de Escamilla en el videoarte, lo que amplía el recorrido de su obra.
Una reflexión sobre arte, feminismo, guerra e identidad
Según Bugeda, la exposición reconoce la trayectoria de la artista y destaca cómo su trabajo invita a reflexionar sobre arte, feminismo, guerra e identidad. De este modo, la propuesta conecta su pasado con sus creaciones más actuales.
Por su parte, Escamilla recordó que en sus inicios su pintura se relacionó con el arte pop. Sin embargo, explicó que en la actualidad busca la abstracción, donde para ella importan la materia, el color y el gesto. Aclaró que su interés principal se centra en el acto pictórico y en la composición.
En la exposición se observan temas que la artista recoge de su entorno cotidiano. Entre ellos señala la guerra, la violencia y las tarjetas de anuncios de prostitución que aparecen en las calles.
“Alteración del orden” incluye también iconografía presente en gran parte de su trayectoria, como los videojuegos, la música, el punk y los símbolos de la publicidad.
Aunque existe un salto de 25 años entre sus primeras obras y las más recientes, Escamilla retoma series clave de su carrera. Destaca la serie “Dolce far niente”, que ahora ofrece versiones masculinas de estereotipos antes atribuidos a la mujer.
La muestra propone una mirada a la posición de la mujer en la historia del arte. Examina cómo a menudo se la ha tratado como objeto y no como sujeto. Un ejemplo es su recreación de “Venus frente al espejo”, transformada en “Apolo frente al espejo”.
La mercantilización del cuerpo femenino y su influencia
En las obras de 2024, Escamilla vuelve a tratar la mercantilización del cuerpo femenino y utiliza imágenes de prostitución. También mantiene la influencia del cine y la música, presentes a lo largo de su carrera.
El título de la exposición proviene de una película en Súper 8 de los años 70. La artista montó las imágenes fotograma a fotograma y creó una nueva ficción que cuestiona el orden social.
