La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) ha salido al paso de la polémica generada por la filtración del audio de una reunión interna celebrada el 19 de diciembre diciembre, en la que su presidente, Miguel Polo, analizaba la gestión de la DANA que afectó a la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre.
El audio en concreto corresponde a una respuesta de Polo al secretario autonómico de Medio Ambiente, Raúl Mérida, al cuestionarle sobre la falta de información entre las 16.13 y las 18.43 horas de la tarde de la riada. En él, el responsable de la CHJ afirmaba que en ese tiempo «no se transmitió información de la rambla del Poyo».
No obstante, el organismo ha aclarado que las palabras de Polo se han sacado de contexto y que el sistema de información funcionó sin interrupciones. Además, la CHJ ha reafirmado que el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) estuvo operativo en todo momento y que se enviaron numerosos avisos sobre la situación del barranco del Poyo.
CRUCE DE ACUSACIONES ENTRE LAS ADMINISTRACIONES
En su comunicado, la CHJ subraya que entre las 16:00 y las 19:00 horas del 29 de octubre, el SAIH emitió un total de 47 avisos de lluvia y caudal, 10 de ellos relacionados con la cuenca del Poyo. A las 18:43 horas, se envió un aviso específico sobre un aumento rápido del caudal en el barranco. La CHJ sostiene que esta información llegó al Centro de Coordinación de Emergencias, aunque la decisión de emitir una alerta a la población se retrasó hasta las 20:11 horas.
📢 Ante las últimas filtraciones aparecidas en algunos medios, desde la Confederación Hidrográfica del Júcar queremos aclarar que las palabras del presidente, Miguel Polo, están sacadas de contexto.
📰 Lo explicamos en el siguiente comunicado 👇 pic.twitter.com/HDgK5CLeSy
— Confederación Hidrográfica del Júcar (@CHJucar) February 4, 2025
La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, ha insistido en que la información del SAIH llegó al Centro de Coordinación de Emergencias, que depende de la Generalitat. Según Bernabé, «los avisos llegaron cada cinco minutos» y ha instado a la administración autonómica a aclarar por qué no se tomaron medidas a tiempo.
Por su parte, desde el Consell de Carlos Mazón se mantiene la postura de que hubo un fallo en la comunicación de la CHJ que impidió actuar con mayor rapidez ante la crecida del barranco del Poyo. Además, han acusado al Gobierno central de restringir las declaraciones públicas de Miguel Polo desde la catástrofe.
La filtración de los audios de la CHJ ha avivado el debate sobre la coordinación entre administraciones durante la DANA. Mientras el Gobierno central y la Generalitat intercambian acusaciones, las investigaciones judiciales tendrán la última palabra sobre las responsabilidades en la gestión de la crisis.













