La Comunidad Valenciana enfrenta una creciente presión sanitaria debido al aumento de infecciones respiratorias, lideradas por la gripe y el virus respiratorio sincitial (VRS). Esta situación ha llevado a algunos hospitales de la región a recomendar nuevamente el uso de mascarillas en sus instalaciones. La medida busca prevenir contagios y mitigar la saturación en servicios esenciales como Urgencias.
En al menos tres hospitales de la Comunidad Valenciana —el Hospital General de València, el General de Alicante y el de Torrevieja—, se ha emitido una circular para el personal, pacientes y visitantes. En ella se recomienda el uso de mascarilla en espacios clave como salas de hospitalización, Urgencias, el Hospital de Día Polivalente y consultas externas. Estas medidas responden al aumento de la incidencia de infecciones respiratorias, que según el último informe del Sistema de Vigilancia de Infecciones Respiratorias Agudas (Sivira), sigue al alza.
El Hospital General de Valencia, por ejemplo, reporta una saturación considerable desde inicios de la semana, reflejo de un incremento notable de pacientes con síntomas gripales y de otras infecciones respiratorias. Aunque estas recomendaciones no son aún obligatorias ni generalizadas, la Conselleria de Sanitat deja en manos de los Servicios de Medicina Preventiva de cada hospital la adopción de medidas según su situación específica.
El caso de los hospitales valencianos no es el primero. El Gobierno de Aragón adelantaba este miércoles una instrucción para hospitales, centros de salud y centros sociosanitarios. En ella inciden en la «máxima recomendación» de usar mascarillas entre los profesionales. Además, la medida también es «altamente recomendable» para pacientes y acompañantes que acudan a estos espacios.
Presión en Urgencias y Atención Primaria
La saturación en los servicios de Atención Primaria ha sido identificada como una de las causas principales del aumento en la demanda de Urgencias hospitalarias. Según representantes sindicales, muchos pacientes recurren a estos servicios debido a las dificultades para conseguir citas médicas en sus centros de salud. Esta situación se traduce en largas esperas para ser atendido e incluso en la acumulación de pacientes en pasillos.
En el Hospital Clínico, por ejemplo, las esperas para obtener una cama alcanzaron las 77 horas en días recientes. Pese a ello, en este centro todavía no se ha emitido una recomendación oficial sobre el uso de mascarillas.
No es la primera vez que los hospitales valencianos recurren al uso de mascarillas como medida preventiva. En enero del pasado año, durante un pico combinado de gripe y COVID-19, se impuso la obligatoriedad del cubrebocas en todos los hospitales públicos de la región.
Aunque la incidencia actual de infecciones respiratorias es menor que la de entonces, las autoridades sanitarias han recordado que esta medida podría recuperarse en caso de ser necesario. Hace un año la incidencia de virus respiratorios llegó a superar los 1.300 casos por cada 100.000 habitantes. A día de hoy, los últimos datos apuntan a 905 casos.
El objetivo principal es proteger a los colectivos más vulnerables, como personas mayores, pacientes inmunocomprometidos y el personal sanitario, y evitar un colapso mayor en el sistema de salud.
