Los alcaldes y alcaldesas de Aldaia desde la llegada de la democracia, Enric Luján Folgado, Empar Navarro Pròsper, Carmen Jávega Martínez y Guillermo Luján Valero, han firmado una carta conjunta en la que reclaman una solución definitiva a las recurrentes inundaciones que afectan al municipio. La carta cobra especial relevancia tras la devastadora DANA del pasado 29 de octubre, que dejó tras de sí un saldo de víctimas mortales y graves daños materiales.
“El clamor de una reclamación histórica de nuestro municipio (…) hoy, sufriendo las catastróficas consecuencias de la DANA, cobra más sentido que nunca: la ejecución del desvío del barranco de Pozalet-Saleta, así como de todo el conjunto de obras que se han de implementar urgentemente”, señalan los firmantes.
Una reivindicación presente desde el siglo XVIII
Esta exigencia no es nueva, pues ya en 1731 se documentó en el «Llibre de Títols» del archivo parroquial de Torrent “una gran avenida de agua que (…) aniquiló casi todo cuando había en las casas, el trigo, aceite, algarrobas, vino, aguardientes y frutos”.
Desde hace más de 40 años, Aldaia ha elevado esta reivindicación a diversas instituciones, independientemente de su color político. Sin embargo, los alcaldes lamentan que “algo que lamentablemente aún se encuentra pendiente de materializar” siga poniendo en peligro la vida y el bienestar de sus ciudadanos.
En la reciente DANA, “la mayor parte de nuestro territorio ha quedado arrasado: casas, garajes, campos, negocios, servicios públicos, infraestructuras… pero lo más importante, y que no puede reemplazarse, son las personas que han perdido la vida”, subrayan. Ante esta situación, hacen un llamamiento urgente a las instituciones autonómicas y estatales para que tomen medidas inmediatas.
“Aldaia es un pueblo emprendedor, dinámico y responsable, que no quiere sentirse vulnerable y quiere vivir sin miedo para poder afrontar el futuro con seguridad”, concluye la misiva, que apela al compromiso y la responsabilidad de los poderes públicos.
La carta, firmada por los alcaldes y alcaldesas de las últimas cuatro décadas, es un recordatorio del impacto devastador de las inundaciones en Aldaia y una petición de auxilio para proteger el futuro del municipio y la ciudadanía.