La exposición de las personas a temperaturas ambientales elevadas puede tener tanto efectos directos sobre la salud como la deshidratación, el estrés por calor o más grave, el golpe de calor; como efectos indirectos, por el agravamiento de enfermedades crónicas.
Desde un enfoque sanitario afecta especialmente a menores, personas de edad avanzada y personas con patologías crónicas de base. Desde un punto de vista social, la marginación, la dependencia, la discapacidad, las condiciones de habitabilidad de las personas con menos recursos y las personas que viven en entornos urbanos debido al efecto isla de calor, añaden factores de riesgo a los grupos de población más vulnerables..
Por todo ello, desde la Conselleria de Sanidad el pasado mes de mayo se puso en marcha una campaña para protegerse ante la llegada del verano y las olas de calor. Así, se establecen una serie de recomendaciones según los niveles de alerta y se ponen en marcha diversos equipos de coordinación socio-sanitaria que cuenta con los profesionales de la salud pública y también responsables políticos y de Cruz Roja o Protección Civil.
Medidas de prevención ante la Alerta Roja
- Cuidado con el sol, especialmente entre las 12 y las 17 horas.
- Bebe abundantes líquidos aunque no tengas sed. Se recomienda una cantidad de entre 2 y 3 litros de agua.
- Evita las bebidas con cafeína, alcohol o azucaradas, ya que pueden favorecer la deshidratación.
- Come abundantes ensaladas, frutas y verduras.
- Cuidado con el coche, no dejes a nadie dentro, tampoco a tu mascota.
- Busca lugares frescos y a la sombra.
- Cuida especialmente a las personas mayores, enfermas y menores de 4 años.
- No realices ejercicio físico intenso en las horas más calurosas.
- Utiliza cremas protectoras adecuadas.
Medidas de prevención ante las Noches Ecuatoriales
- Manténgase en lugares frescos, con aire acondicionado o bien ventilado y use ropa ligera.
- Hidrátese, evitando bebidas muy azucaradas o alcohólicas y las cenas copiosas.
- Preste atención a los síntomas del golpe de calor (T.ª corporal elevada, sudoración, mareos, confusión…).
- Vigile especialmente a las personas mayores, enfermas y menores de 4 años.