Encuentran a una joven al borde de desangrarse en un baño de La Marina tras un apuñalamiento
Comisaría de Proximidad del Marítimo.

Dos agentes de la Policía Local de Valencia han salvado la vida de una joven que podría haber fallecido desangrada. La chica, menor de edad, se encontraba herida en un baño portátil de La Marina donde había sido víctima de cinco navajazos. Al parecer, la agresora era otra chica también menor que ya ha sido detenida.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado, según han adelantado desde la Policía Local. Agentes de la Comisaría de Proximidad del Marítimo se encontraban realizando funciones de tráfico próximas al Paseo de la Marina Real Juan Carlos I. Fue entonces cuando un viandante se acercó a ellos alertándoles de que en el acceso al parking se estaba desatando una pelea.

Al llegar hasta el lugar ya no había nadie discutiendo pero sí localizaron un rastro de sangre producido por las heridas de una implicada. Al seguirlo, este les condujo hasta un baño portátil de La Marina donde se encontraba una menor al borde de desangrarse. La joven presentaba diversas heridas de arma blanca de gravedad y dado que estaba perdiendo una cantidad abundante de sangre, uno de los agentes le practicó un torniquete en el brazo.

Ante la tardanza de la ambulancia y el estado de salud de la chica que continuaba perdiendo mucha sangre, los agentes optaron por trasladarla ellos mismo a un centro hospitalario. En el camino se encontraron con el vehículo sanitario encargándose ellos de atender a la menor que presentaba cinco cortes localizados en un brazo, la pierna, una ingle, la barbilla y la espalda. Rápidamente se le trasladó hasta el Hospital Clínico de Valencia.

UNA MIRADA, EL MOTIVO DE LA DISCUSIÓN

Según narraron los testigos de los hechos a la Policía Local, varias personas intentaron que la discusión cesara sin éxito alguno. Por lo que ha trascendido, se trató de una pelea banal porque una joven acusó a otra de haberla mirado mal. La víctima intentó mediar en la discusión donde participaba una de sus amigas y fue en ese momento cuando la agresora sacó una navaja y la apuñaló en varias ocasiones.

En el lugar de los hechos se encontró la navaja con restos de sangre de la presunta agresora. Tras la información facilitada por los testigos se localizó saliendo de un autobús a la presunta agresora y una acompañante, ambas con restos de sangre. Además, la agresora iba con una mano vendada, por lo que también fueron trasladadas a un hospital de la ciudad.

Posteriormente fueron llevadas dependencias policiales quedando a disposición de la fiscalía de menores. Esta intervención fue realizada con la colaboración de agentes del Cuerpo Nacional de Policía.