La Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (EMSHI) sigue fomentando espacios de diálogo en torno al agua. El último foro impulsado por esta administración pública lleva por título ‘Asegurar el agua para garantizar un futuro’.
En este coloquio se han analizado las soluciones llevadas a cabo en Valencia y su área metropolitana de la mano de la presidenta de la EMSHI, Elisa Valía; la alcaldesa de Bonrepòs i Mirambell, Raquel Ramiro; y el alcalde de Cheste, José Morell.
El encuentro, moderado por la periodista Lorena Padilla, ha tenido lugar en el edificio de la biblioteca pública de Cheste. La Asamblea de la EMSHI aprobó el pasado diciembre el cambio de reglamento que rige las condiciones para ser miembro de esta entidad, lo que abre las puertas a Cheste.
En palabras de Morell se trata de “una cuestión trascendental e histórica”, dado que “ahora mismo bebemos de pozos y el acuífero Cheste-Buñol está sobreexplotado”. Por ello, el alcalde considera que “la solución es pasar a beber agua de la EMSHI”, puesto que “el abastecimiento humano ha sido un problema constante desde que el pueblo nace hace 700 años”. Además, Morell ha añadido otros “beneficios”, como es “asegurar el desarrollo económico agrícola e industrial” de la localidad.
El agua, fuera de contiendas políticas
Por su parte, Valía ha recordado que “la mirada metropolitana de la EMSHI se concreta en que hay municipios que tienen un problema histórico o reciente con el abastecimiento de agua a la población y al tejido productivo y la EMSHI tiene la obligación de posibilitar que se solucionen los problemas en localidades que no forman parte de la entidad ahora, pero que tienen que ir incorporándose, como es el caso de Cheste”.
“El agua debe estar fuera de las disputas políticas y debe situarse en un marco de colaboración para mejorar la vida de la gente, que es para lo que las políticas y los políticos estamos aquí”, ha insistido la presidenta.
Así, Raquel Ramiro ha explicado la importancia para localidades más pequeñas, como Bonrepòs i Mirambell, de pertenecer a la EMSHI. “Para nosotros es vital. No podríamos hacer la gestión del agua de manera directa por la gran inversión que habría que realizar en servicios hidráulicos”, ha indicado.
Ramiro se ha mostrado a favor de la gobernanza metropolitana, pues “debemos trabajar más las uniones, no sólo en el agua, sino también en la gestión de residuos, transporte y movilidad y todo lo que va a llevar a la sostenibilidad”.
Alianzas entre municipios para garantizar el abastecimiento
En esta línea, y teniendo en cuenta la emergencia climática, Valía – quien también es concejala del Ciclo Integral del Agua en el Ayuntamiento de València- ha indicado que “generar alianzas es el único camino que nos lleva al éxito porque no hay ningún reto que la capital pueda abordar en solitario y sin tener en cuenta las realidades de alrededor”.
A su juicio, “los municipios más grandes tienen que ayudar a los más pequeños con menor potencia inversora a conseguir los retos. Si Valencia hace su camino, pero el resto no lo hace, a Valencia no le sirve de nada”. La presidenta ha insistido en la relevancia de “tener la vocación de incorporar nuevos municipios a la EMSHI, ir ampliando la base, como es el caso de Cheste”.
Para Valía, “cuando hay voluntad e intentos para innovar las fórmulas, lo que parecía un problema insalvable, se supera”, pues “no tiene sentido que una entidad metropolitana se dote de herramientas que impidan de facto la entrada de muchos municipios que necesitan a la EMSHI para garantizar el abastecimiento de agua”.
Valía lo ha resumido así: “Si al final nadie ofrece ayuda a quien la está pidiendo porque tiene la intención de sufragar las infraestructuras que se requieren, pero no tiene la capacidad de realizarlas, no estamos avanzando nada. Esto es generar alianzas y trabajar por el futuro porque el agua es un reto y no tiene ningún sentido pelear por los recursos porque lo que hay que intentar es garantizar que todo el mundo disponga de ellos”.
Unión con el sector privado e innovación
Al hilo de la reflexión de Valía, Morell ha mencionado las economías de escala y ha asegurado que “el fenómeno de las ciudades no podemos verlo como términos municipales”, pues “ahora se habla de áreas metropolitanas y tenemos que ir a eso: es una buena respuesta que haya una institución que englobe todos esos fenómenos”.
En el coloquio, Ramiro ha puesto en valor la colaboración público-privada y ha hecho hincapié en la idea de unión, en referencia a “olvidar los colores políticos” cuando se trata de abordar del reto del agua ante la emergencia climática. La alcaldesa ha incluido en su intervención la idea de “tener claro qué clase de cultivo debemos trabajar teniendo en cuenta el agua”, así como las virtudes de la reutilización de agua.
En esta línea, Valía ha recordado que “la eficiencia del área metropolitana es cercana al 100% y ha explicado que en la EMSHI se está invirtiendo mucho en innovación y, sobre todo, en gestión”. De hecho, “el agua la puedes gestionar de manera eficiente, pero no la puedes producir como la energía”, ha añadido.
De acuerdo con sus palabras, “las políticas medioambientales se centran mucho en las políticas verdes, pero muy poco en la política azul. Ahora estamos consiguiendo que el agua esté en el centro del debate, no sólo político, sino también público: se habla mucho más de agua”.