La avenida de Ausiàs March, una de las arterias de entrada y salida más transitadas de Valencia, vivirá pronto una transformación. El Ayuntamiento de Valencia aprobará en la Junta de Gobierno del viernes una modificación del Plan General para reurbanizar y renaturalizar la avenida.
La propuesta de Urbanismo implica reducir los carriles de circulación para convertir la avenida en un bulevar verde. Además, trasladará las áreas verdes a la proximidad de las fachadas de las viviendas. También incrementará las zonas peatonales y la movilidad sostenible frente al vehículo motorizado.
«Lo que pretendemos es que Valencia esté preparada para combatir los efectos del cambio climático y avanzar hacia una ciudad más resiliente al aumento de las temperaturas», ha declarado la vicealcaldesa y concejala de Desarrollo Urbano, Sandra Gómez.
«Ayer precisamente hubo un estudio que tasaba el impacto de las olas de calor en 900 muertos al año en las grandes ciudades de España. Señalaba al asfalto, la falta de arbolado y al exceso de contaminación y de tráfico como principales factores causantes del aumento de las temperaturas y del efecto isla de calor», ha explicado. Ahora el objetivo del Ayuntamiento es «darle la vuelta a esto».
Por otra parte, el nuevo plan de Ausiàs March incluye «la dignificación de todas esas viviendas que están frente a una gran avenida». «Esto también va de modelo de barrio, de modelo de ciudad. Ser vecino de una gran avenida no tiene por qué condenar a vivir siempre rodeado de contaminación acústica y medioambiental».
AUSIÀS MARCH SERÁ MÁS VERDE Y PEATONAL
La modificación del PGOU permitirá un cambio de usos de la vía. En la actualidad tiene un 78% del espacio dedicado al tráfico y un 22% al peatón y la movilidad sostenible. Con las modificaciones que se introducirán, las proporciones se invertirán. Los peatones y el transporte sostenible tendrán el 66% del espacio mientras los vehículos de motor ocuparán el 34%.
La nueva modificación quitará un total de cinco carriles para el tráfico motorizado. De los cuatro centrales por sentido se pasará a tres por sentido, es decir, seis en total. Además, se eliminará el aparcamiento y las vías de servicios (tres carriles más).
Las zonas verdes pasarán a estar ubicadas en los laterales de la vía. Según han explicado, se creará una frontera verde que separará las fachadas de las viviendas del tráfico de los vehículos. Esta modificación generará también espacios de encuentro ciudadano como zonas verdes o plazas. También coserá los barrios, dinamizará la vida comercial y creará espacios públicos en Malilla, en Corts, na Rovella y la Font de Sant Lluís.