Por qué han vuelto a pitar los móviles de Valencia esta mañana
Un usuario consulta su teléfono móvil en la calle.

El Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha un proyecto piloto de aparcamiento inteligente. Este abarca 1.098 plazas reservadas a personas con movilidad reducida, carga y descarga y paradas de taxi. En cada una se ha colocado un sensor que detecta la presencia de vehículos. Dicho sensor transmite la información a una plataforma conectada con la AppValència, el geoportal y València al minuto. Con estas tres herramientas, la ciudadanía puede consultar en tiempo real la disponibilidad de aparcamiento.

El Ayuntamiento ha destacado los beneficios de esta medida smart city tanto para la ciudadanía como para los servicios municipales. Por un lado, se evita al vecindario pegar vueltas para encontrar aparcamiento. Por otro, el consistorio dispone de numerosos datos para determinar cuáles son los lugares con más y menos uso, en qué barrios se encuentran, cuál es la frecuencia de rotación o si se ha excedido el tiempo máximo de estacionamiento.

La herramienta también contribuye a planificar de manera más efectiva la distribución del aparcamiento en Valencia. Además, existe la opción de configurar alarmas que avisan al personal municipal de incidencias e infracciones. Asimismo, se facilita a terceros ―plataformas logísticas o taxistas, por ejemplo― que configuren aplicaciones externas propias.

En total, se han sensorizado 689 espacios reservados a personas con movilidad reducida; 317, a carga y descarga, y 92, a paradas de taxi. Los dispositivos están instalados directamente en la plaza o en la acera, según la tipología de estacionamiento.

Esta es una actuación piloto que se pretende ampliar en un futuro en número de localizaciones y funcionalidades. Así, se estudiará un sistema de reserva que permitiría a las empresas de transporte elegir las mejores rutas de reparto, disminuyendo costes, generando menos contaminación y con menor ocupación del espacio público.