La Dirección General de Tráfico está desarrollando una plataforma llamada DGT 3.0. Controlará nuestra localización, velocidad y maniobras en tiempo real. Pretenden controlar el tráfico no a las personas. Podría ser una buena alternativa a los actuales radares. Tendrá una licitación de 3,3 millones de euros para poner en marcha una tecnología para que la DGT pueda tener controlado en todo momento el estado del tráfico en las carreteras a través de la información que le envía cada vehículo.
Los datos se tratarán de forma anónima, no se van a identificar vehículos y personas, la información se utilizará para conocer el estado de las carreteras. Esta nueva aplicación intentará ayudar a los conductores, evitando atascos o incidentes en la carretera. Estar conectados a la nube puede ser una ventaja, pero también peligros, es decir, no sabemos si en un futuro con un cambio legislativo, las autoridades puedan tenernos controlados. Incluso puede servir para sancionarnos.
El sistema DGT 3.0 quieren ponerla en funcionamiento en el año 2026, momento en que casi todos los coches incluyan sistemas obligatorios de localización como la llamada de emergencia automática eCall. Un sistema que comunicará nuestra posición GPS exacta en tiempo real. Incluso las luces de emergencia tendrán conexión a internet y los coches dispondrán de ‘cajas negras’.