Una pitbull le arranca el brazo a un niño de cuatro años en la ciudad de Tecumseh, Oklahoma. La víctima es un pequeño llamado Axel Foster que estaba al cuidado de sus abuelos.
Todo empezó cuando el menor metió la mano donde su abuela guarda a sus pitbull, para jugar con los cachorros que había tenido. El animal interpretó el gesto como una amenaza, se abalanzó de forma agresiva y arrancó el brazo al pequeño.
El menor fue trasladado al hospital, los servicios médicos intentaron implantarle de nuevo el brazo, pero no pudieron hacer nada. Después de los hechos, su madre, Destiny McDow, ha iniciado una recaudación de fondos para ayudar a su recuperación.
Los abuelos del niño fueron quienes avisaron a la Policía, pero estos poco pudieron hacer por salvar la extremidad de Axel, según informa Fox News. Los abuelos podrían enfrentarse a cargos de negligencia infantil. Fuentes locales afirman que la perra ha sido ejecutada. Las asociaciones de animales destacan que no hay que poner el foco en las razas de los animales sino en los dueños. Una buena educación y cuidado de nuestros animales es vital para evitar este tipo de sucesos.