El Hospital Universitario San Jorge, en Huesca, ha registrado uno de los primeros bebés del mundo con coronavirus. Según informa el diario El Heraldo, la madre habría dado a luz al bebé ya infectado. De confirmarse este caso, sería uno de los primeros casos de transmisión del virus durante el embarazado en todo el mundo.
El medio local también informa la madre fue sometida a una PCR antes de ingresar y dio positivo. El parto se realizó con todos los protocolos necesarios y, al nacer el bebé, se le realizó el test y, para sorpresa de todos, se confirmó el contagio del neonato. Los pediatras del centro están investigando cómo se produjo la infección. El recién nacido se encuentra en buen estado bajo vigilancia médica. Los bebés infectados no suelen desarrollar síntomas graves de esta enfermedad, según los expertos.
Los neonatólogos admiten que no se puede descartar al 100% la transmisión del virus antes del nacimiento. Pero de ser así, los pocos casos han evolucionado satisfactoriamente. En cualquier caso, los recién nacidos hijos de madres COVID-19 no han padecido una enfermedad de infección por coronavirus. La evolución ha sido favorable salvo por los problemas relacionados por su prematuridad.
En más del 60% de los casos se ha mantenido la no separación de la madre de su bebé, se ha mantenido el contacto piel con piel al nacer y la lactancia materna. Cuando esto no ha sido posible, los motivos han sido la gravedad de la enfermedad de la madre o la necesidad de hospitalizar al recién nacido, generalmente por prematuridad. En otros casos, la separación de la madre de su hijo ha sido necesaria por la imposibilidad estructural de mantener a ambos aislados en habitaciones individuales, pero estos casos han sido poco frecuentes. Unos datos esperanzadores para futuros partos.