La Policía Local de Valencia ha desalojado a medio centenar de personas que estaban reunidas en una fiesta clandestina. Los hechos ocurrieron el domingo por la mañana en la fábrica abandonada de «La Eskombrera», junto al cementerio de Benimaclet.
Agentes de la Unidad de Convivencia y Seguridad (UCOS) fueron los responsables del dispositivo. Éste acabo con el desmantelamiento del botellón; el levantamiento de 51 acticas, 42 por no llevar mascarilla y 9 por posesión de drogas; y la detención de una persona por delito contra la salud.
El detenido fue un joven de 26 años. Éste llevaba una riñonera que contenía 7 bolsas con seis gramos de speed cada una; otra con 0,71 gramos de MMDA; ocho pastillas de éxtasis; una de marihuana y un total de 259,60 euros.
Esta no es la primera vez en la que la Policía Local actúa en el mismo punto de Benimaclet. Durante el mes de septiembre los agentes levantaron 104 actas a personas sin mascarillas; 26 por posesión de estupefacientes; y 5 por tenencia de armas. Además, detuvieron a 4 personas por alcoholemia e interpusieron 13 denuncias por atentar contra la Seguridad Vial.
EL AYUNTAMIENTO TACHA LA FIESTA DE «GRAVE IRRESPONSABILIDAD»
El concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, ha lamentado el incidente por medio de un comunicado. Cano señala que es una «grave irresponsabilidad» porque son actos «comprometen la salud de tantas personas».
«Seguimos actuando contra la Covid-19, contra la pandemia pero necesitamos de la participación de toda la ciudadanía», ha añadido el concejal. «Todos somos responsables de esta situación, no se puede vencer a la Covid-19 con la responsabilidad de una parte de la población y la irresponsabilidad permanente de otra parte que, por muy pequeña que sea, es una agresión permanente a toda la sociedad» ha concluido.
