Un grupo de 89 escolares del Liceo Francés de València ha llevado a cabo la primera limpieza minuciosa de una playa tras la borrasca Gloria en el Parador de El Saler, siguiendo las pautas del Ministerio de Transición Ecológica para el estudio del litoral español dentro del programa de Ciencia Ciudadana.
Además del gran daño a las dunas, a los expertos de la Fundación Oceanogràfic que han dirigido el trabajo les ha llamado la atención que, al contrario que con anterioridad al temporal, apenas han recogido colillas y bastoncillos – sólo unos 239-, mientras que había una abrumadora presencia de útiles de acuicultura, tales como pulperas de plástico, restos de nasas o cabos hechos de plástico de un diámetro de unos cinco centímetros, marañas de cabos y trozos procedentes de la degradación de los cabos.
Ha sido llamativa, igualmente, la aparición de bombillas de luz incandescentes, medicamentos y, como es habitual, productos higienicosanitarios y cartuchos de caza.
Vuelta al mar complicada
Como es habitual en las limpiezas de playa organizadas por la Fundación Oceanogràfic, una vez concluida la labor y hecho el recuento de las basuras para la ficha del ministerio, se ha procedido a soltar una tortuga de las recuperadas en el ARCA del Mar del Oceanogràfic.
La tortuga, numerada como 501, procedente de la pesca de arrastre de Burriana y “bautizada” por los escolares como “Mediterrani” tuvo dificultades para entrar en el mar debido al movimiento de arena tan grande experimentado en la franja de rompiente. Tras diversos esfuerzos y cambios de rumbo logró adentrarse en el mar.